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Antiguos alumnos dominicos VIRGEN DEL CAMINO - LEON

SEGUNDO PEDAZO, TROZO O PETAZO. (Crónica de Javier Cirauqui)

SEGUNDO PEDAZO, TROZO O PETAZO. (Crónica de Javier Cirauqui)

Después de los maravillosos libros, presentaciones y comentarios sobre ellos. Aquí os mando esta croniquilla, (quizás más bien cronicaza) del encuentro de Valladolid. Se me ha alargado en el tiempo y en el espacio. Unas veces con problemas con el ordenata, otros con la tableta y luego con la pereza. Espero que alguno de vosotros pueda terminar de leerla, pues me he quedado traspuesto con la Capilla Benavente.

 

JORNADA PRIMERA DE LA CRÓNICA DE VALLADOLID.

 

 

Cogemos  el autobús,

Al  extremo de la plaza,

Y nos vamos dirigiendo

Al pueblo de Fuensaldaña

Para comer todos juntos                                                                                                                                        

En la “Bodega Sorbona”

El trayecto se hace corto,

Llegamos en un momento.

Pasamos junto a un castillo,

 Vallisoletano estilo,

Sede del Parlamento

De Castilla y de León,

Durante unos largos años.

 

Según indican las cuentas

 Llegamos cuarenta y nueve.

Somos medio centenar

De alumnos y profesores.

En busca de un buen yantar

 

Por el trayecto Fernando,

Nos va explicando el programa:

A comer en La Bodega

De la Sorbona llamada.

Y acabada la manduca

Nos iremos a Medina,

Medina de Rioseco,

El lugar donde habitaron,

Almirantes de Castilla.

Visita a Santamaría,

Llamada de Media Villa,

Capilla de Benavente

Y al canal que transportaba,

Tirados por animales,

El grano, en barcas de sirgas,

A los puertos del Cantábrico.

Interviene Manolón,

Que con su decir gracioso,

Nos va contando  unos chistes,

Picarescos, vegetales.

Contagia a Fernando Box,

Que acaba contando chistes

Del mismo verde color

Para sorpresa del público

Y regocijo de todos.

Llegamos  a “La Bodega

De  La Sorbona” llamada,

 Y no sé por qué razones

De esta manera nombrada.

Antiguas bodegas eran

Del pueblo de Fuensaldaña,

Unidas en comedores,

Para  turismo enológico.

Bajando las escaleras,

A mis recuerdos acuden,

Las bodegas de La Virgen,

Que en mi memoria infantil

Eran tumbas de gigantes,

Gigante Kilikizarra

Que murió y estiró la garra

Llegados al comedor,

Los cincuenta comensales,

Entre alumnos y mujeres,

Y  profesores presentes,

De los que vinieron siete.

Pedro Sánchez  y Tascón,

Máximo Marina y Lobo,

José Luis Suarez y Box

Y José Álvarez también

A la derecha  y  la izquierda

Se extendían amplias mesas,

Las que fuimos ocupando,

Los venidos a este encuentro.

 

Las bóvedas de cañón

Cubrían nuestras cabezas

A lo largo las paredes,

Mucha decoración

De utensilios de labranza,

Medidas de longitud,

Cribas, cuadros y almireces,

Palmatorias, campanillas

Planchas, horcas y candiles,

Algún cesto, unos serones,

Un peso y una romana,

Y un fraile con su capucha

Que el  tiempo nos predecía.

Algún calendario antiguo,

Viejas botellas de anís,

Calendarios modernistas,

Y otros muchos cachivaches

Adornaban el recinto.

 En las mesas colocados,

Fluyó la charla al momento

Con los vecinos del  frente

Con los vecinos de al lado.

Los platos y los cubiertos,

Sobre la mesa extendidos

El pan, el agua y el vino

Y los vasos en su sitio.

Nos van sacando el menú

En el centro de la mesa:

Queso con uvas, morcilla,

Los torreznos y el chorizo,

Patatas a la importancia

Y unas jugosas croquetas.

Todo ello bien regado

Con un vino de Cigales,

Denominación de origen

De este buen caldo clarete,

Que nos alegra la fiesta

Y colorea el moflete.

Hablamos y conversamos

Con interés y entusiasmo.

Hasta que llega el segundo,

El afamado lechazo,

De ensalada acompañado

Que está  como ya esperamos

Para chuparse los dedos,

Las costillas y las piernas,

Servidas por separado.

Y para terminar, el postre:

Tarta de queso casera.

Las copas y los cafés

Y chupitos regalados.

Como decía mi padre,

Me he quedado como el cura,

De mi pueblo que es Burlada,

Que también es mi cuñado,

Que en honor a la verdad

No comía tan colmado.

Brindis y despedidas

En la puerta La Bodega,

Los abrazos y apreturas,

Pues varios de los presentes

No vienen hacia Medina.

Por eso les despedimos

Con el canto preferido

Por profesores y alumnos;

“Adiós madre de mi vida,

Triste llega la partida”…

 

Volvemos al autobús, 

Para llegar a Medina,

Medina de Rioseco,

 Tierras vallisoletanas.

Manolo nos ameniza

Con sus dimes y diretes

De su acervo popular,

Bienes inmateriales

De cultura singular.

El camino se hace corto,

Y llegamos a Medina,

Ciudad de los almirantes.

La Muy Noble y Muy Leal,

La bella Vieja India Chica,

Como bien se le conoce.

Aparcamos extramuros,

Convento de San Francisco,

Hoy museo de arte sacro

Y residencia de ancianos.

Rúa Mayor adelante,

Del Camino de Santiago,

Entre porches caminamos.

Iglesia de Santa Cruz,

De una imponente fachada,

Con diseño de Vignola

E influencias herrerianas,

Y hoy convertida en museo

De nuestra Santa Semana.

A lo lejos se divisa

La Iglesia Santiago Apóstol,

Hecha por Gil de Hontañón,

En gótico comenzada,

Con portada plateresca

De factura muy labrada,

Que hace poco fue la sede

De las Edades del Hombre,

Como algunos recordaban.

Ahora a mi memoria viene,

Un viaje que realizamos,

Con el Padre Arsenio Arenas

Al Camino de Santiago,

El viaje final de curso

Y  estuvimos aparcados,

Esperando nos abrieran

Las puertas de dicho templo

Para poder visitarlo.

Y no sé por qué motivo,

Con la puerta en las narices,

Nos dieron a los alumnos

Del año cincuentainueve,

Pues recuerdo el exterior

De plateresca fachada

Y barroca al otro lado,

Que Arsenio nos explicó.

 

 

Nuestro objetivo es pisar

La Iglesia Santa María

De Mediavilla llamada,

Para ver todo el conjunto

Y con especial deseo

La Capilla Benavente

Que algunos llaman Sixtina

De nuestro renacimiento

Que es imponente y divina,

La iglesia es de estilo gótico,

Sin fachada principal,

Con  torre de cuatro cuerpos

Y con remate final

De hermoso estilo barroco

 

Una vez  entrados todos

En la magnífica nave

De esta iglesia catedral,

Nos recibe enjuto guía,

En esta nave central.

Nos va explicando primero,

Esta iglesia en general.

La planta tiene tres naves

Con bóveda  crucería,

Separada por columnas

Y por pilares cilíndricos.

En esta nave central,

Se ve el retablo mayor,

Hace poco restaurado,

De imponente arquitectura,

Que impresiona a nuestros ojos,

Y es conforme al orden clásico,

Cumbre del renacimiento,

Dieciocho metros de altura

Y que consta de predela,

El ático y los dos cuerpos,

En tres calles se separa,

Asunción, Coronación

Y como ya es preceptivo,

En el ático un calvario.

En la predela se hallan,

Figuras de alto relieve

De San Pedro y de San Pablo

Por Juan de Juni  talladas.

Monumentales estatuas

Profetas, evangelistas,

Algún padre de la iglesia,

Y  es  de traza romanista,

Por Becerra diseñada.

Juan de Juni lo acabó

Con Esteban de Jordán.

Pedro de Oña lo doró

Y otros colaboradores

Terminaron la labor.

En esta nave central

Se encuentra una obra maestra

De rejería española.

Cristobal  de Andino fizo.

Sillería de nogal,

Datada en el dieciocho

De una belleza sin par.

Y levantando la vista,

Justo entrando por la puerta

Hermoso órgano barroco,

Hecho por Francisco Ortega

 En lo alto contemplamos.

Destaca entre sus tesoros

La capilla Benavente,

Situada en la cabecera,

Al  lado del evangelio

Y que fue la sacristía

En  anteriores momentos.

Aunque integrada en la iglesia,

Valor de templo en sí misma

Tiene la dicha capilla.

Relicarios y tribuna,

retablos y sacristía,

Y hasta un coro se veía.

Es capilla funeraria

De sobriedad exterior

Romano renacentista

Con el interior contrasta,

Que es de gran exuberancia

Decorativa interior,

Con programa iconográfico,

Sutilmente diseñado

Por un padre dominico,

Entre profano y sagrado.

Cripta tiene bajo el suelo,

Por una puerta se accede

A la izquierda del altar,

Por el lado de la epístola

Al  recinto funeral.

 

En el suelo y en el centro,

Sepulcros de fundadores,

Inscripciones en latín,

Que  establecen relaciones

 Con la salvación del alma.

El retablo de los pies,

Es conjunto abigarrado

En el que destaca Cristo,

En majestad y grandeza

Por los ángeles músicos

De la corte acompañado,

Cuatro padres de la iglesia..

Tema de la fe cristiana,

El tema central compone,

Cristo Crucificado,

Redime a la humanidad.

En el luneto de arriba

Tenemos la creación.

El Padre a la mujer crea

De la costilla de Adan

Entre la luna y el sol.

El edén es escenario

De mucha vegetación´

Y parejas de animales

Lo pueblan a discreción.

Esta obra fue realizada

 Por los hermanos Corral

Y algunos otros pintores

De su entorno laboral.

Algunos años más tarde,

En el retablo del ábside,

Juan de Juni esculpe y labra

Un retablo singular,

Rejas renacentistas

Cierran esta capilla

De factura castellana,

Por Martínez realizadas.

En muro del Evangelio,

Yacen antepasados

De Álvaro Benavente,

Comerciante riosecano,

Con escudos y epitafio.

A Eva le tienta el demonio,

En serpiente convertido

Y da la manzana a Adán,

Mientras ángel justiciero,

Expulsa del paraíso

A nuestros primeros padres.

Al  lado muerte burlona

Va tocando la guitarra

Con clara risa de mofa.

En los tímpanos pinturas,

En la tabla realizados.

La hija de Jairo revive,

Hijo viuda de Naín,

Y  Lázaro resucitan.

Por encima la ventana,

 Que ilumina la capilla,

El arcángel San Gabriel

Anuncia a la Virgen Madre

La venida de Jesús.

 

Nuestro guía nos explica

Todos los pormenores,

 Que adornan esta capilla,

Guiándonos las cabezas

Y  los ojos  asombrados

 Por toda su geografía,

Como partido de tenis,

De la izquierda a la derecha,

De la derecha a la izquierda,

 Girando el cuello sin pausa

Como un mágico resorte.

Me temo que os he aburrido,

Con tantas explicaciones.

Disculpadme la turrada,

Pero tanta maravilla,

Merece la pena, y  sigo.

 

Retablo en la cabecera

Presidido por la Virgen,

Inmaculada María,

Hecho por Juan de Juni,

Con una gran maestría.

En el ático los ángeles

A la Virgen le coronan,

Vida de San Joaquín

Y de su esposa Santa Ana,

Nacimiento de la Virgen

Presentación en  el Templo,

Asunción Nuestra Señora,

Símbolos  del  Tetramorfos

Y seis figuras de apóstoles,

Este retablo completan.

 

Dirigimos la mirada

Hacia la bóveda de horno,

Con el cuello levantado,

Donde se encuentra la escena,

Que concentra más figuras,

Que es la del Juicio Final.

 En el centro El Salvador

Sobre un carro que es tirado,

Por símbolos Tetramorfos

Y aplasta demonio y muerte,

Componiendo la Deesis,

El Padre Eterno y la Virgen,

Espíritu Santo y San Juan.

Abajo los condenados,

Se retuercen en suplicios,

En el fuego del infierno,

El guerrero y el doctor,

El obispo, el rey, el papa,

Nadie escapa a la justicia,

A la divina justicia.

 

Fernando  en estos momentos,

Con el permiso del guía,

Nos interpreta la bóveda,

Sostenida por pechinas,

Entre las que aparecían

Sibilas y evangelistas.

La cúpula se divide

En varios compartimentos.

Por sus numerosos nervios,

No se cruzan en el centro,

Al  exterior personajes

Del Antiguo Testamento,

Como Moisés, Jonás,

Daniel, Isaías, Job,

Eliseo y Salomón

Y también el Rey David.

Hacia el interior se ven

Unas representaciones

De carácter astrológico,

Júpiter, Saturno y Venus,

Marte, Mercurio y el Sol,

La Luna y un tal Ofiuco,

Que explica Fernando Box

Y entre estos medallones

Con ángeles portadores

De todos los instrumentos,

Que contienen La Pasión.

Por encima ocho virtudes:

Fe, Esperanza y Caridad,

La Justicia, la Templanza,

La Prudencia, Fortaleza,

Como final la Bondad.

Entre todas las virtudes

Se intercalan los escudos

De la saga Benavente.

El octógono central,

Decorado con estrellas,

 Cabezas de querubines,

En fondo azul le rodean.

De esta manera los ricos

Se compraban un lugar

En el reino de los cielos.

Dejamos ya la Capilla,

Gratamente impresionados.

Nos despedimos del  guía,

Con merecidos aplausos.

Javier Martín nos indica,

Que se parece a San Bruno,

Cartuja de Miraflores,

Que hace poco ha visitado.

Pero salgamos afuera,

A tomar el aire fresco

Junto al Canal de Castilla.

 

Desde la Rúa Mayor

Nos vamos hasta la dársena

De este Canal de Castilla.

Sueño de la Ilustración

Es en el siglo dieciocho

Crear una red de canales

Para transportar la lana,

Los vinos y el cereal

Hacia los puertos del norte.

Obra de ingeniería

De trabajo impresionante,

Que rompe el aislamiento

De Castilla en ese instante.

Con la venida del tren,

El canal se vino abajo,

Aunque estuvo aprovechable

El año cincuentainueve.

El único navegable

 De España y su geografía.

A un lado se ven los muelles,

Al  otro está la harinera,

Y en sus bordes muchos árboles.

Las aguas están tranquilas

Y parecen un estanque.

Hoy en día este canal

Se ha convertido en un parque

Con cruceros en un barco,

Antonio Ulloa llamado.

Rutas en bicicleta,

Piragüismo y senderismo,

Paseos  naturalísticos,

Visitas a San Antonio,

Vieja fábrica de harinas.

Entre sus orillas tienen

La vida muchas especies

 de la fauna y de la flora.

Nos sacan fotografías,

Junto al agua de la dársena.

Un monumento recuerda,

La construcción del Canal,

Bien de interés cultural,

Ciudad de los Almirantes,

Medina de Rioseco.

Por la calle arriba vamos

A coger el autobús,

Que nos lleva hasta Pucela.

Hermosa ciudad Medina,

Ciudad de los Almirantes,

Medina de Rioseco,

Para siempre en mis recuerdos

Y prendida a mi retina.

 

Cuando son las siete y media,

Regresamos en el “bus”

Camino Valladolid.

Comentamos la visita

Con verdadero interés,

Nuevos chistes, chascarrillos

Y volvemos al hotel,

Para prepararnos presto

Y salir a tapear

Como nos dice el programa

Por el centro la ciudad.

Cita en la Plaza Mayor,

Se va juntando la gente

En la terraza de un bar.

Otros están esperando

Junto a la estatua de Ansurez,

Como Clemente nos dijo.

Nos indica, este, el trayecto,

Por donde tomar los “pintxos”.

Nos marca un itinerario

 Por los bares de tapeo.

El Bar Jero y el Zamora,

La Criolla y el Postal,

El Corcho y el Alarcón.

De quince a veinte personas

Formamos la expedición.

Nos dirigimos en grupos,

Y comienza la incursión

En el mando de las tapas,

De los vinos, la cerveza

Y de la restauración.

Vamos entrando en los bares

A pedir consumición,

Champiñones, calamares,

Tortillas y bacalao,

Embutidos, bocadillos,

Lomo y ensaladillas

Y patatas a la brava,

Adornan el mostrador.

Degustamos ricas viandas

Con verdadero placer,

Conversación animada,

Risas y buen comer.

Y después de algunos bares

Damos ya por terminado,

Estas giras por lugares,

Donde la gente disfruta

De vinos de la región,

De buena gastronomía

Y grata conversación.

Los dos grupos nos juntamos

Y catamos un buen queso,

Que compró José Fernando,

Para en su casa acabarlo.

Volvemos hacia la plaza

Y un “cubatilla” tomamos

Sentados en la terraza.

Muy contentos y saciados,

 Volvemos hacia el hotel,

Pues las luces y las sombras

Se quedan para otra vez,

Porque mañana tenemos

Otra jornada que hacer.

Que tengáis muy buena noche

Y que durmáis a placer.

 

Besos, Javier.

 

 

 

 

 

 

 

 

.

 

 

8 comentarios

Vibot -

Gracias, Fernando, si un día quedamos en Rioseco, seguro que yo también viviré momentos fantásticos con tus sutiles explicaciones y tu voz que, aunque matizada por los años, conserva aún todos los dejos de tu juventud.

fernando muñoz box -

Santines:
Cosa dici...!
¡Cómo no voy a explicarte lo que quieras cuando me lo pidas...!
En serio: Gracias a Javier por su crónica y sus amables alusiones al que suscribe.
Fueron momentos fantásticos.

Javier Cirauqui -

Bueno, Vibot, tengo un amigo que es de Zamora y que muchas veces me hablado de las patatas a la importancia, que eran como unas patatas de domingo. Me encanta el nombre y por eso lo recuerdo siempre. En Navarra se llaman patatas guisadas o albardadas.
Que conste que estaban muy buenas y me imagino cuando, de nuevo las haga tu madre te sabrán a gloria.
Desde luego que la Capilla Benavente merece la pena con toda su exuberancia, barroquismo y simbolismo. A mi me gusto mucho y me enganchó por su iconografía y por las explicaciones de Box y del guía, vamos a darle su mérito. Toda Medina de Rioseco merece la pena, para mí fue un grato descubrimiento.
Un fuerte abrazo. Javier

Javier Cirauqui -

Miguel Ángel:

Desde luego que mi intención no es dormiros sino despertaros con todo lo que he visto y gozado en este encuentro. En el próximo pedazo, como tu dicés intentaré llevaros por el sueño del arte, del que tanto hay en Valladolid y poneros hasta transportaros por los cielos etéreos de Urdax, Zugarramurdi y Sara, con escoba y sin escoba, (no os estoy llamando brujas).
La jornada se presta, pues visitaremos la exposición de la melancolía, con Santa Teresa y otros en éxtasis, levitando y en el momento de la transverberación.
Luego visitaremos el palacio de Cnosos (Creta) y nos perderemos por el Laberinto de Ariadna, seguidos por el Minotauro y espero nos pongamos a cien, aunque sea con la vista y recreo de tantos caldos que vimos y que los que estuvimos allí, algunos, degustamos.
Con mucho cariño. Javier

Javier Cirauqui -

Bueno Luis, me encanta que te haya gustado mi crónica y que me compares con Gonzalo de Berceo, aunque solo sea por lo del "vaso de bon vino", el roman paladino y el hablar con tu vecino.
Desde luego que el "vaso de bon vino" lo traje puesto de Valladolid y si quieres conocer todos las tascas, tabernas y figones de Valladolid, contacta con Clemente.
Decirte que yo también ando interesado en los Juan de Juni, Berruguetes y Becerras. Hoy he comenzado la lectura de tu libro: "Lo mataron entre todos".
Un fuerte abrazo. Javier

Vibot -

Javi Cirauqui, estas navidades le pediré a mi madre que me vuelva a cocinar como cuando era niño, patatas a la importancia, un plato pobre muy rico que no había vuelto a escuchar desde hace muchos años pero que entre tus cariñosos octosílabos me ha envuelto en sus aromas y sabores de infancia. ¿No eran unas lonchas como de un centímetro de grosor, rebozadas y en una salsa con sabor a madre, a hogar, a cielo?
¡Y esa capilla dorada, qué ganas de correr a Medina! La pena es que ya Box no me la explicará. Ni reiré con vosotros de sus chistes y los de Manolo...
Tenía que haber ido.

Miguel Ángel Díez Ordóñez -

Cirauqui, aunque en el sueño prevalecen más las imágenes, no creo que te puedas quedar sin palabras, y te animo a que el TERCER PEDAZO, ya que nos dejas durmiendo, sugiero que lo refieras al sueño onírico del arte... ,tú sabes: Juan de Juni, Berruguete, Juan de Herrera, Valladolid pone mucho, ponnos algo de ésto si te parece--se pide a quien tiene-- y, mientras, en sueños, tomamos unos Rueda, comemos unos pintxos y a las seis de la mañana, como jóvenes, ya bien puestos de arte sin porrete, nos vamos a dormir.
Sugiero.

Luis Carrizo -

Como siempre, Cirauqui, has explicado todo con pelos y señales, y con esa vena de poeta del pueblo que le presta a tus descripciones este aroma que recuerda a Gonzalo de Berceo. Compruebo, por otra parte, que el "vaso de bon vino" ya te lo trajiste puesto antes de escribir, en previsión de cualquier eventualidad. Hiciste muy bien.
Yo me he leído con atención lo
relativo a los Juan de Juni, Becerras, Pedros de Oña y compañía, pero donde tomé notas por escrito fue en lo relativo a los bares de tapas de Valladolid: el Jero, el Zamora, la Criolla... así como la ubicación de una bodega que me ha gustado no por lo de bodega, sino por lo de Sorbona (y si cuela, cuela).
Quedamos esperando el TERCER PEDAZO.