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Antiguos alumnos dominicos VIRGEN DEL CAMINO - LEON

VALOR Y CONTRAVALOR -1- (Por Jesusito Herrero)

VALOR Y CONTRAVALOR -1- (Por Jesusito Herrero)

 

En estos últimos días se está escribiendo en el blog sobre los valores y contravalores.

Jesusito el Herrero pone imagen a ambos dos.

 

7 comentarios

Luis Carrizo -

Gracias Losada, Jesús y tocayo Luis por vuestra felicitación. He cumplido 67, pero conste que aparento 66. No sé si eso será un valor, contravalor o minusvalor. Espero que Baldo me lo aclare.

Luis Heredia -

Llego tarde pero llego.

Felicidades a mi tocayo Carrizo, a Jesusito por su arte y a Baldo porque no hay quien le coja en un renuncio.

Jesús Herrero Marcos -

Por cierto, felicidades a Carrizo, sobre todo por ser su cumple.

Javier Cirauqui -

Mas vale un buen ejemplo que mil palabras para definir los valores y los contravalores. Sobre todo si es un ejemplo grafico y artistico
Muy bueno Jesus.

Alfonso Losada Vicente -

Hola, a todos:
En primer lugar, felicidades a todos los que cumplen años en estos días, en este caso Carrizo.

A Baldo: Valor o contravalor, ahí está el dilema; ¡fíjate lo que entenderé de este tema! Que no sé quién lo dijo o
escribió.
Fuera de allí, no estudié
nada, por eso me pilláis en
fuera de juego, cuando habláis de este tema; no obstante me sonrío cuando
leo esta especie de discusión entre vosotros;
por lo cual no me decanto
por ninguno.
Te agradezco la descripción
que haces de mi persona (no
sabía que supieras detalles
de mí). Ahora no me parezco
en nada al de entonces, ya
lo verás si algún día nos
vemos, que espero sea pronto

Muchas gracias y un fuerte
abrazo.

Losada

Baldo -

Amigo Jesusito Ferrariense (este sobrenombre da mucho prestigio en los ambientes escolásticos, que es donde mayor o menormente me muevo yo). Entre el Pitu Casorvidense y tú, veo que estáis formando una entente para desbancarme del podio de "discípulo amado" de Eladio y sustituirme por Fernando Alonso o por Miguel Ángel Ordóñez (con quien creo que coincidí en la Virgen del Camino en el curso 1973–74), o por algún tapado. En el primer asalto, El Casorvidense ha quedado con el culo al aire, porque quería meterme unos manuscritos de un excelentísimo pariente suyo, Obispo de TromKin, como escritos en chino mandarín, cuando en realidad estaban inconfundiblemente caligrafiados en chino cantonés. No pudo replicarme, porque todo era claro y meridiano.

Tú te presentas a la refriega con un equipamiento muy superior: la maravilla de tu arte pictórico. Ahí sí que no puedo competir. A los dos os sobra ingenio del bueno, pero yo tengo que defenderme como gato panza arriba. Empiezo, por decirte, Jesusitodemivida, que no has reparado en que la viñeta es un valor destacado, que aparece a primera vista y que enriquece la vertiente vital estética por su belleza; pero también la cognitiva, por el ingenio, coña, chispa, agudeza, sutileza, etc. que despliegas en ella. No es reparado en que si el martillo es un "artefacto" o un "tecnofacto", ambos valores o contravalores –ya se verá al final– de la vertiente cognitiva científica técnica. Veo que lo de ahorrarse la pasta es un valor predominante. Creo que es modalizador de todo lo que pasa en la viñeta, o sea, que el clavador tiene como modelo humano el HPC (Hombre Productor Consumidor o también Hijo Puta Cabrón). Podías haber recurrido a un subsahariano sin papeles, que seguramente, por unos pocos eurillos te lo hubiera clavado con su cabeza y te hubieras ahorrado todo lo que vino después; el susodicho subsahariano lo hubiera colocado torcido, pero hubiera quedado clavado, que era de lo que se trataba.

¡Ay, amigo, en el centro de la viñeta, has colocado algo importante y que has despachado simplemente con que pertenece al área religiosa! Y a otras más. Suponte que es la Virgen sobre una góndola de media luna, balanceándose por encima del infierno lleno de réprobos dando gritos de dolor y desesperación. ¿Quién te dice a ti que no fueron condenados por algo que ahora ya no es pecado? Pues que la injusticia divina es cruel por no tener efectos retroacticos. Ahí tienes un contravalor de tamaño infinito. Y tú sin verlo. Sin salirnos del cuadro de la virgen: ¿lo robaste en un mercadillo de baratijas, tiene reflectantes irisados, es de los chinos, suelta cardenillo porque tiene algo de cobre, fue barato –si lo robaste, está claro– es capaz de unir en torno a él a las personas de la familia para cantarle las flores a porfía, mete miedo? Todo eso hay que analizarlo, querido Jesusito, y a ti se te ha pasado por algo.

Vayamos al que tú calificas sin dudarlo de contravalor: el golpe en el dedo que te hizo ver estrellas colorás por toda la casa. ¿Realmente es un contravalor? Imagínate que a tu alrededor, presenciando la escena, estuvieran Carrizo (que hoy cumple años, 67), el Pitu, Manolón, Luisito Heredia, Cirauqui y Losada (entonces era un chico alto, bien parecíu tirando a guapetón, deportista, gallasperu, con pasos largos, y además nacido en El Hierro, según nos decían los de segundo). Si el martillo no da en el clavo ni lo paras con el dedo, a lo mejor describe un semicírculo a media altura y siegas las partes pudendas de todos los que están allí, con lo que se arma una tortilla de tal calibre que ni Argüeso la hubiera comida de tres sentadas. ¿Qué sucedería? Que a esos pobres –yo, por suerte, no estaba entre ellos, pero podía haberme puesto– les hubiera venido a la vez la jubilación anticipada y la impotencia anticipada. ¿No te da pena esto? En este caso ¿es un valor o un contravalor parar ese artefacto de martillo con el dedo?

Jesusito Ferrariense, si quieres desbancarme, a buen seguro que lo conseguirás sin mucho trabajo. (Es una pena que no hayas ilustrado mis apuntes cuando los daba en el instituto). Pero por de pronto no olvides lo que dice Chávarri por boca de Caloline Carrizo: Les êtres seront considérés par la personne comme des êtres bénéfiques s’ils favorisent le développement de leur vie dans ses versants vitaux, ou comme des êtres nuisibles s’ils la détériorent ou la détruisent. Dans le premier cas, ces êtres sont appelés valeurs, dans le second cas, il s’agit de disvaleurs ou contre-valeurs. He dicho.

Ramón Hernández Martín -

¡Jajajá! Amigo Baldo, ¡sal ahora de este laberinto o sacúdete esta pesadilla", pues, ítem más, si imaginas que la alcayata es la cabeza de un político, valor-contravalor del área sociopolítica; si te ríes de las imprecaciones del manitas torpón, valor-contravalor del área lúdico-humorística, y, así, hasta el infinito. Todo es real, como la vida misma, solo que esta nuestra, a la que, velis nolis, acaban de darle un "trumpazo", tiene pocos visos de escapar a las cadenas del HPC (siglas de Eladio, aunque también caben las otras) dominante.