Me lo apunto, Jesusito. Tienes toda la razón Luis. Sí, Miguel Ángel, comimos bien bien cosas del terruño y abundancia de pulpo tambien. Personalmente, un día para recordar.
Jesús Herrero Marcos -
Y llegado a este punto no tengo más remedio que recordar a los autores Trapi y Mallada que convendría que mandaran sus ejemplares correspondientes y gratuitamente a la Biblioteca Dominicana que dirige con mano sabia y amorosa fr. Jesús Martín. Cada libro que salga de las manos del Gran Lalo (aparte de las de sus autores) debería mandarse a modo de Depósito Legal a dicha Biblioteca, donde ya sabéis que los Antiguos Alumnos tienen estantería propia. Furri, anda, da la orden que a ti te hacen más caso.
Luis Carrizo -
Gracias, Josemari, por colgar las intervenciones de los tres padrinos y de los tres misacantanos, que he escuchado con gran atención y placer. No sé si es un efecto subliminal del productor, pero lo que más destaca de las grabaciones, con gran diferencia, son los aplausos. Por cierto, muy bien merecidos. Quiero hacer una sola observación particular acerca de la presentación de Pedro Trapiello a propósito de la lectura de la página 42. Podría haber sido la 57 o incluso los títulos de crédito. Sin desmerecer el texto del Trapi, que me encantó, tengo que señalar que si Pedro, con esa voz de barítono y ese saber decir, leyese un pasaje del listín telefónico, incitaría sin duda a la concurrencia a salir inmediatamente a comprarlo. Enhorabuena a todos.
Miguel Ángel Díez Ordóñez -
¡Ay, qué poco caso hacéis! Come poco y bebe poco... y vosotros comiendo y bebiendo y escogiendo lugares donde la comida es abundancia... mejor es que la escasez. Comeríais, sospecho, como sierpes, glotonamente, y como la digestión es larga y lenta y el sueño del recuerdo es profundo... por esto no escribís, por placentero-estado-adormilado, que os retiene. Bueno, algunos escribís libros, nacieron tres librines, pero recordad que Pedro G. Trapiello dice muchas veces que la mejor manera de que algo no se conozca es escribiéndolo;- sabe, aunque es un poco descreído, algo quevedesco, pero tiene un punto de sazón. Nacieron tres libros y estaréis orgullosos de asistir a su bautismo... y no sólo por lo que zampásteis! Y es que cuando el hambre material se puede satisfacer gratamente, entonces así algunos hombres con una sensibilidad especial se dedican a otras conquistas de la expresión. Mi enhorabuena para los tres!
4 comentarios
Andrés Martínez Trapiello -
Tienes toda la razón Luis.
Sí, Miguel Ángel, comimos bien bien cosas del terruño y abundancia de pulpo tambien.
Personalmente, un día para recordar.
Jesús Herrero Marcos -
Furri, anda, da la orden que a ti te hacen más caso.
Luis Carrizo -
Quiero hacer una sola observación particular acerca de la presentación de Pedro Trapiello a propósito de la lectura de la página 42. Podría haber sido la 57 o incluso los títulos de crédito. Sin desmerecer el texto del Trapi, que me encantó, tengo que señalar que si Pedro, con esa voz de barítono y ese saber decir, leyese un pasaje del listín telefónico, incitaría sin duda a la concurrencia a salir inmediatamente a comprarlo.
Enhorabuena a todos.
Miguel Ángel Díez Ordóñez -
Come poco y bebe poco... y vosotros comiendo y bebiendo y escogiendo lugares donde la comida es abundancia... mejor es que la escasez.
Comeríais, sospecho, como sierpes, glotonamente, y como la digestión es larga y lenta y el sueño del recuerdo es profundo... por esto no escribís, por placentero-estado-adormilado, que os retiene.
Bueno, algunos escribís libros, nacieron tres librines, pero recordad que Pedro G. Trapiello dice muchas veces que la mejor manera de que algo no se conozca es escribiéndolo;- sabe, aunque es un poco descreído, algo quevedesco, pero tiene un punto de sazón.
Nacieron tres libros y estaréis orgullosos de asistir a su bautismo... y no sólo por lo que zampásteis!
Y es que cuando el hambre material se puede satisfacer gratamente, entonces así algunos hombres con una sensibilidad especial se dedican a otras conquistas de la expresión.
Mi enhorabuena para los tres!