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Antiguos alumnos dominicos VIRGEN DEL CAMINO - LEON

QUERIDO LIBRO VIEJO

QUERIDO LIBRO VIEJO

Nuestro compañero José Ignacio Mallada nos declara su amor a este libro, que está muy "viejín", pero que contiene en cada una de sus hojas y de sus costuras recuerdos de aquellos años en los que aprendíamos lo que eran "el amor, el dolor, el valor y la belleza", también la tristeza, los miedos y la soledad.

Amigo José Ingnacio, gracias por tus recuerdos y por tu sensibilidad..

Mi querido e inolvidable Jose Mari,

 

Me permito en estos momentos una reflexión sobre un libro de texto que conservo desde hace 44 años y que creo debe tener un lugar en el blog, Está muy viejín,pero todavía rezuma ternura. Gracias a él conocimos en nuestra  juventud cómo los hombres expresaban el amor ,el dolor, el valor y la belleza. Este libro fue la estrella de muchos años y de muchos  cursos. Creo que merece un reconocimiento él y los profesores que lo comentaron. Quién lo podrá olvidar y no dedicarle unas líneas?

 

Titulo: HISTORIA DE LA LITERATURA ESPAÑOLA.

Autor: GUILLERMO DIAZ-PLAJA

EDICIONES LA ESPIGA

Sexta edicion, muy ampliada: setiembre 1942

Era libro de texto en 1963 en el Colegio de la Virgen del Camino (casi ná)

Profesor: P.Felipe Lanz Yoldi.

 

Tengo una deuda contigo,

querido libro viejo,

 

por tantos ojos negros que  te leyeron,

por tantas voces blancas que te durmieron,

por tantas suaves manos que te cogieron,

por tanto que diste y no te dieron,

por tanto que quisiste y te quisieron.

 

querido libro viejo,

te llevaré siempre conmigo.

 

Un abrazo,

José Ignacio.

 

4 comentarios

Ana -

Pues sí, amigo, comparto contigo el amor por los libros y cuanto más llenos de vida más respeto me merecen los viejos libros.
¿Hay algo que no pueda enseñarte un libro?

Eugenio González Núñez -

Sí, Mallada, recuerdo el libro, y sus hojas viejas y amarillas que me producían "dentera" al pasarlas... y recuerdo cómo ciertos piadosos-desalmados estudiantes las arrancaban, las metían en el seno, protegidas por el "guardapolvos" (nuestro uniforme oficial), y le presentaban al buen P. Felipe unos exémenes perfectos... También recuerdo el nuevo libro que, en parte, lo sustituyó. Era de la editorial SM y costaba 40 pesetas. En su portada, de colores opacos (pero ya ¡a Dios gracias!, algunos colores para deleitar la vista), aparecía el príncipe Segismundo, de la "vida es sueño", encadenado. Creo que era un fotograma de la película.
Sí, Mallada, y recuerdo a Frade, a Castañón, a un servidor, y a algunos más repasando/memorizando en el jardín la lista inacabable de las obras de Lope de Vega, de... con puntos y comas, es decir "ad pedem litterae" (¿correcto?) para rendir cuenta a los profesores (léase cariñosamente "huesos" de turno) del claustro de profesores (¡qué solemne!).

¡Haces bien en recordar! La vida diaria es muy prosaica. El recuerdo es hermoso, y si de recuerdos no se vive, al menos con recuerdos... es posible soñar... "Yo sueño que estoy aquí", de la Palin ya cansado, "y soñé que en otro estado"...
con Obama me... (¡será posible!, no encuentro la rima), pero te prometo que después de las elecciones finalizo esta paráfrasis.
Un abrazo doble (Mallada/Frade), amigos del alma.

Eugenio

enrique frade alonso -

Querido Mallada.
Al principio de este blog quise influir en Yi para que nos dedicases algunos versos ,que quizás tuvieses dormidas las musas ,poro veo que las has despertado y de que manera. Sigue deleitandonos con tus escritos,que tte agradecemos. Mi profesor favorito en literatura era el padre Iparraguirre que alguna vez me metió en algún embolado.Recuerdo que una vez tambien gané un concurso de poesia,,en el colegio,desde entonces no he vuelto a escribir ninguna por no hacer sombra a los poetas,era su trabajo,Yo ya tenia a la Telefónica.
Un abrazo para Tí y para todos los blogueros.

Angel Luis Valdés -

Querido Serrano-Mallada:

Noto en tus reflexiones palpables rescoldos de nostalgia, y me gusta.

Dejas ver , también , tu fina sensibilidad, no solo con las personas, sino con las simples cosas que,como ese libro, a veces, no son tan simples para uno mismo.

Deseo que, como ese libro, manoseado, que ha visto pasar ante él tantos ojos, tantas manos jóvenes, tantas voces blancas, tantas morriñas, tantos llantos y tantas risas, te conserves, aunque sea "viejín", otros cuarenta años, y que todos los que te queremos de verdad podamos verlo.

Un fuerte abrazo.
Valdés.