A PENDÓN TENDIDO
...el pendón tendido, como véis en la fotografía, encabezaba la procesión del regreso de la Virgen del Camino hacia su nuevo Santuario entre una multitud incontable y gran emotividad, rodeada por los Padres Dominicos y custodiada por los números de la Guardia Civil que se observan en las fotografías. Era la mañana del día 5 de Septiembre de 1961. A las 15:15 horas llega la imponente procesión al altar exterior del Santuario, colocado al pie de la torre, hermoso campanil de 53 metros de altura con sus tres imponentes campanas, cada una supera los mil Kilos. Voltean las campanas, como cuando sonaban en el Estudio como aviso para ir al Rosario del Santuario a las 5 en punto de la tarde de cualquier domingo. Son los sonidos de las campanas de mi niñez.
Comenzó la misa cantada (el coro lo componíais algunos de los que en este momento estáis leyendo este retazo de historia, ¿verdad, Ito, Trapi y Pajarín?) oficiada por el entonces Obispo de León D. Luis Almarcha. La prensa cifró la asistencia en 50000 personas.
En el momento del ofertorio, nuestro inolvidable y querido D. Pablo Díez, entonces de 77 años, presentado en su niñez a la protección de la Virgen del Camino, acompañado por su esposa Doña Rosario Guerrero, renovó con su ofrenda el agradecimiento a la Reina de León. Habló en nombre propio y en el de todos sus paisanos leoneses. estas fueron sus palabras textuales (son testigos el micrófono de La Voz de León y la mirada penetrante del PaPedro):
"Para la madre reservamos los mejor de nuestros afectos, y gozamos profundamente ofreciéndole los obsequios más preciados y preciosos. Este ha sido el único ideal que nos ha guiado en la construcción de ese nuevo templo. Con ansias de acertar, hemos buscado lo mejor aprovechando todo los adelantos que la técnica y el arte nos ofrecen. Es cierto, Madre, que nos llena de satisfacción ofrecerte tu nueva casa, pero sobre todo nos entusiasma y enardece hacerlo ante esta muchedumbre de tus devotos, presididos por las autoridades eclesiásticas y civiles de esta mi bien amada tierra leonesa."
El Obispo Almarcha respondió dando las gracias "..al insigne bienhechor en nombre de la Virgen del Camino y de la tierra leonesa". D. Luis había escrito en una carta pastoral: "...La realidad ha superado la esperanza, ha sido un nuevo milagro de la Virgen".
Concluida la Misa, la imagen de la Virgen fué entronizada en el Nuevo Santuario y colocada en su mismo lugar de siemnpre, en el centro del retablo del siglo XVIII.
Yo estuve allí, junto a mis siete hermanos, de las manos de nuestros queridos padres, Pilar y Andrés. Nuestros nombres, os lo ha contado mi hermano Andrés, ya estaban guardados "dentro" de la Virgen.
A los pocos días de este magno acontecimiento, el que os escribe ingresaba en el Colegio Apostólico com a.o.p., era finales de Septiembre de 1.961, ahí empezaría esta apasionante aventura que me ha llevado hasta vosotros.
He empezado escribiendo a pendón tendido, y estoy acabando a moco tendido. No penséis mal, es por el frio de este puñetero y querido León. Está nevando. Alguien escribió que este clima solo lo soportan las caballerías y los canónigos.
3 comentarios
Vibot -
Yo también recuerdo deslumbrado una procesión de Rogativas para pedir la lluvia unos años después, en la que se desplegaron todos los pendones de los alrededores. ¡Qué lujo medieval y escenográfico, entre el calor de Julio y las humildes acacias de la carretera, casi secas de sed pero impregnando el aire denso y como de espejismo, de su infinito aroma casi de nardo indiano, refrescando aquel aire de sabana.
Años después en el cuartel de El Ferral, escribiría un intenso poema en mi cuaderno de campaña con el título de "Gurrelied", bajo el alto recuerdo de aquellos pendones votivos.
El Sordo -
¿Era para mi?
Pues sí, ya he probado y funciona, pero... ¿alguien sabe porqué el mudo está tan callado?
A lo mejor hasta ha cantado y no lo oí, como soy duro de oido...
josemari cortes -