LAS CORBATAS DE JULITO
Ved la foto que nos hizo Alberto este viernes: Manolo Centeno, Josemari, Julito Correas, Quique Ideas Muñiz y Andrés el Trapi.
Pues sí, amigos, Julito se hizo carne y habitó entre nosotros durante el reglamentario Prieto Picudo de los viernes al mediodía.
Y es que la vida es solo para los valientes: Julito Correas acabó sus clases, benditas y merecidas vacaciones para los del sindicato de la tiza, cogió su montante y se vino hasta León a tomar el vinín con sus amigos. A la una y media recibo su mensaje "¿hay Prieto picudo?". Y sí lo hubo, nos dió la sorpresa y gozamos durante unos pocos minutos de la compañía de Julio, Julito, el Julio Correas de siempre, cariñoso, alegre, elegante, riendo, abrazando, fumando. No podía faltar mi hijo Alberto quien, todos los viernes, baja del autobús del Colegio y no se pierde el vino, bueno... él bebe Fantas y da cuenta de las tapas de todos.
Os contaré una anécdota. El año pasado, la tarde anterior al reencuentro de Octubre, estuvimos tomando los vinos vespertinos y la correspondiente cena todos los del Grupo de León con nuestras santas, además de Pilarína y Luisito Heredia y de Julito Correas que habían llegado esa misma tarde. Estábamos concentrados, como los futbolistas, pensando en lo que podría suceder los dos días siguientes, animándonos entre nosotros, la verdad un poco asustados por la respuesta que todos habíais dado al sueño del Reencuentro y soñando con que las cosas discurriesen como en realidad sucedieron.
Esa tarde, a mi hijo Alberto le debió llamar la atención que Julio estuviese tan elegante y se encaprichó con su corbata. Julio le prometió que le regalaría una. La verdad es que yo mismo me había olvidado de la corbata. Pues mira por donde, el viernes le trajo una caja de dulces "Corbatas de Unquera". Y también un paquete del Corte Inglés con dos corbatas, una inglesa amarilla con cuadros verdes oscuros y la otra italiana con unos perros juguetones sobre un fondo azul pálido.
Y yo pensaba, ¿cómo es esto posible?, ¿por qué ha tenido presente su pomesa?. Y yo miraba a Julio y me maravillaba de que, además de todas sus preocupaciones-ocupaciones-alegrías-disgustos, etc. de su vida cuotidiana, hubiese tenido un hueco en su agenda mental para acordarse de mi hijo. Y yo agradecía muy profundamente su detalle, soy un blando, y como no sabía qué decir pues empecé a sudar como un gochín y disimulaba diciendo que se me subía el prieto picudo. Y es que quien hace algo por mi hijo tiene para siempre un hueco en mi corazón y en mi hogar, además de tener asegurada una Subdirección General en la Furrielería, eso sí, sin sueldo.
Después de cuarenta años sin vernos, yo tengo un hijo muy especial, tengo de nuevo a mi amigo Julito, tengo de nuevo a mi amigo Centeno y Alberto ya tiene dos corbatas. Y es que soy inmerecidamente afortunado. ¿Alguien me lo puede explicar?.
Ah, se me olvidaba; Julio, para las corbatas a Alberto le hace falta un traje, a poder ser de Príncipe de Gales. Te mando las medidas.
Gracias amigo, siempre.
9 comentarios
andres cortes aranaz -
Feliz Navidad.
Anselma -
Hay un mudo aquí, en el pueblo, pero no creo que sea él; aunque ya le preguntaré.
Oye, Valdés, que leo que te carteas con uno que está lejos, allá en Bélgica, que estuvo por allí Ovidio, en la emigración, que entonces ese tal Argüeso sería un chavalín, y que dice que conoce a una camarera: ¿es verdad?. Es que Juliana marchó para allí también hace años y no ha vuelto, y dice Antolín que trabajaba en un bar. Pero, quiá: tiene que se más mayor que la que conoce ese Argüeso.
JOSE MANUEL GARCÍA VALDES -
Te felicitaré aunque no sé si lo mereces por ahorrar en exceso.
El mudo -
Andrés Martínez Trapiello -
Que no busques más camareras ahí, en Bruselas, que hay una aquí, en el Niovel donde tomamos el otro día el Prieto Picudo, que dice Julito que es Húngara.
¿Y yo que creía que era de Quintana o de Casorvida?
Julio Correas -
JoseMari, otra vez que la vida me manda una lección :
AMOR con AMOR se paga.Y en este caso ... ciento por uno.
GRACIAS A TI, Y SOBRE TODO A ALBERTO.
Tener un hueco en tu corazón y en el de tu familia es mucho más de lo que merezco y es muy importante para mí, y además me gusta, coño!
La subdirección general de la furrilería intentaré que sea compatible con la Dirección General de la Centeno Oil Company ... y santas pascuas.
Cuando Andrés se tuvo que ir a poner sellos en Correos, me fui con Quique y con Centeno a comer. Magnífica comida, aunque Quique se tuvo que ir pronto.
Centeno y yo nos dedicamos a darle a la lengua y nos duró hasta las seis y media DE LA TARDE, (multa de zona azul incluida)
que nos fuimos a visitar otra vez a Tundi, la camarera, por si no nos habíamos despedido de ella convenientemente.
Lalo, nos acordamos de tí. La camarera (Tundi de Hungría) sólo se acuerda de Justino, que estaba camino de Avila, pero le informamos de todo, via telefónica.
Andrés pagó con un billete de 19 y la camarera se lo cogió... como quien no quiere la cosa. Ela sabía que OTRO VENDRÁ QUE BUENO TE HARÁ.
César, tienes toda la razón, estos abrazos, cada vez que se producen, hacen que se repita el espíritu de la Navidad.
Un abrazo muy fuerte a todos
Julio Correas
P.D. Me acaban de decir que en diez o doce horas llegará a este mundo mi segundo nieto, Pablo G. Correas. Hoy también va a ser Navidad.
lalo -
En la foto falta Justino, así que él es quien está negociando con la camarera, ¿no?
salud
lalo
Andrés Martínez Trapiello -
Loseiros (César Alvarez) -
José Mari, leyendo tu comentario, se me hablandan las carnes por la ternura y elegancia de tus palabras que seguro combinaron a la perfección con las corbatas de Julio y los prieto picudos que trasegásteis.
Son los encuentros y los gestos como los que se transmiten en este blog,los que hacen posible el espíritu de la Navidad.
Felices Fiestas y un abrazo para los 6. César