fotografías de javier trascasa
Nuestro compañero Javier Trascasa Pampliega nos envía esta serie de fotografías de la Virgen del Camino que fecha entre los años 1972 y 1973. (Aún me quedan otras pocas).
Os las dejo en sus álbumes correspondientes.
Nuestro compañero Javier Trascasa Pampliega nos envía esta serie de fotografías de la Virgen del Camino que fecha entre los años 1972 y 1973. (Aún me quedan otras pocas).
Os las dejo en sus álbumes correspondientes.
15 comentarios
Vibot -
Julio Correas dice arriba que el P?. Enrique, al salir remojado de la piscina, te mandó a hacer la maleta y te expulsó del colegio.
Seguro que lo dijo -y habría que verle la cara de odio y todo lo peor que te pondría- pero no me puedo creer que realmente te echaran por aquello. Y mucho menos, que él confesara las verdaderas razones de tu heróica reacción.
Si existía un mínimo de decencia, cordura y coherencia con tanto sermoneo sobre la pureza, el pecado, el infierno, la homosexualidad a la que sólo se aludía de través pero a muerte (nada de "parejitas", no vayáis de dos en dos, ojo con las amistades particulares, mucho cuidado con "el problema afectivo", etc...) si exsistía un mínimo de justicia, no es a ti a quien debieron expulsar sino a él. Del colegio y de la orden.
Por favor Julio, ya imagino que no será nada agradable para ti revivir todo aquello, pero acláranos cómo acabó aquella agresión tan impresentable e inmoral que sufriste. O nos quedaremos con la idea de que prevaleció la sinrazón. Lava, si se puede, el honor del colegio.
Quién era el Prior entonces, qué medidas tomó?
Perdona si te pido demasiado.
Javier Cirauqui -
Yo nunca estuve en la Escuela Menor. Los cuatro Cursos que estuve en la Virgen del Camino, mi director era el P. Pedro y el Subdirector, el P. Enrique, aunque no sé si algún año nos cambiaron de Subdirector, al final de mi estancia en León.
Las que más podrían hablar del P. Enrique, son las paredes de aquellos cuartos-almacén, que había en las clases. Allí hacíamos las copias para las partituras de la escolania, en los pupitres yo las hacía a bolígrafo y en el almacén le daban a la multicopista. Algunas veces la gente salía roja e irritada, como cabreada. En el estudio el P. Enrique me llamaba feo y otras lindezas, mientras posaba su mano sobre el compañero de al lado. Cuando salíamos al campo o de paseo nos arengaba sobre la inconveniencia de que fuesemos dos sólos y que lo mejor era ir en grupo. Estaba visto que lo mejor era hacérselo en grupo, o en trío. La casualidad era, que siempre me recriminaba, cuando iba con el mejor de mis amigos.
Algún día abundaré sobre estas lindezas. Buenísimo, lo del lanzamiento a la piscina. Qué pena no haberlo presenciado.
Un saludo.
Javier.
Rufino -
Mis mejores saludos a todos, los subdirectores r que estaban con Cura, creo que no son esos, pero no puedo precisarlo, Huarte, Angel Casado, Sánchez, Oloriz... menudo jaleo.
Si alguien lo sabe con certeza, es un dato curioso, sería bueno tenerlo.
Amigo Vibot, quieres saber como le castigaron.... Joer, que morbo
un abrazo
Vibot -
¡Con dos cojones, qué valiente que fuiste, Julio S., no se merecía menos el tío!
Era para haberle linchado entre todos. Ojalá hubiéramos seguido tu ejemplo en tantas ocasiones.
Me imagino el revuelo que se armaría. Visto desde ahora suena hasta divertido que un chaval tirara aun fraile a la piscina con todos sus capisayos -y seguro que todos los que lo vieron se partirían de risa y se alegrarían pues además era un tirano en clase con unos ataques de ira temibles con aquella expresión animalesca que se le ponía y los maltratos que nos propinaba- pero me puedo imaginar el susto y la repulsión que sentirías.
¿Cómo te castigaron por ello?
Tienes que contárnoslo. Por favor.
santiago rodriguez -
Con relación al P. Enrique me uno a Vibot, Federico y a tí; de el recuerdo que para desengrasar jugaba de extremo derecha, jugaban con la tunica porque el p. Eulalio C. Ruiz no quería que los frailes jugaran con chandal; yo jugaba de defensa izquierdo, y un dia le hice una entrada en que volaron las gafas por un lado y Enrique por otro con un grandioso siete en la tunica. Me mando a la capilla a rezar un rosario y me negue a ir
Julio Correas -
Yo sólo os cuento que cuando salió por la escalera más cercana a la "puri" y colorao como un pimiento de Calahorra, le dijo a Julito eSe que se fuera a hacer la maleta y se marchara a su casa.
La historia merece la pena!
Según cuentan muchos,el pobre estaba tan desviado y deteriorado que le gustaba comprobar al tacto a quién le había salido el bello púbico.
Yo siempre me preguntaré cómo fue posible que el Quiquito, con su rizo en la frente en su cabezón más gordo que su culo y el Ricardo,hasta en la Capilla (hoy almacén) camparan a sus anchas haciendo y deshaciendo, a la vista de los valedores de la "mens sana in corpore sano" y vuelta a la finca con "horcas caudinas" incluidas, para que el espíritu se forjara en la dureza y en la castidad!
Yo tuve suerte.
Mejor no meneallo!
Bhavya -
Saludos
JOSE MANUEL GARCÍA VALDES -
Yo ya hablé
Benito Pérez Villalba -
federico esteban monasterio -
Saludos.
santiago rodriguez -
lalo -
No respondo por años anteriores y posteriores, pero entre el 64 y 70 los jefes eran:
1964 a 1967 ESCUELA MENOR
AÑO - director / subdirector
1964 - pCura / pAngel P. Casado
1965 - pCura / pHermida?
1966 - pHuarte / pNaranjo
1967 A 1969 ESCUELA MAYOR
1967 - pCura /pAlfredo
1968 - pCura / pOlóriz?
1969 - pHuarte / ?
De 1965 a 1967 el director de la Escuela Mayor fue el pPedro y uno de sus subdirectores fue el pSánchez, pero no recuerdo más.
No es la primera vez que lo pido, y no estaría mal reproductirlo en el libro, pero parece que estamos muy mal de memoria si entre todos somos incapaces de establecer los nombres y fechas de directores/subdirectores de la paramera.
¿Habrá que recurrir al pHuarte?
Y el pFernando (pPaco), ¿no tiene Internet?
Ánimo y Salud
Lalo
P/D Por cierto, Jesús Herrero, esta mañana el cartero me trajo un sobre.
Y otra cosa: ¿te has fijado? Acabamos de llegar a la mitad. Ya solo quedan 150.
Más salud
santiago rodriguez -
Vibot -
Encantadora foto.
Del Padre Enrique no quiero ni hablar.
Benjamín Díaz Gutiérrez -