PORTADA DEL VIEJO SANTUARIO

Fotografía de Georges Chevalier y Auguste Léon, durante su viaje los días 23 y 24 de mayo de 1917 por estas tierras.

2 comentarios

[Ramón Hernández Martín - 05 de mayo de 2019 - 09:57]

Como veo que los comentarios duermen la siesta, sin la más mínima intención de despertar a nadie y aunque sea a través de filos de navaja o escaladas peligrosas, ahí os va el enlace del artículo que acabo de dejar en "Esperanza Radical". Difícil cometido el de ir tras un cristianismo que sea o deba ser pura floración de mayo, pura alegría. Feliz domingo, acurrucados en el atrio o antesala del cielo que es o debe ser la propia vida.
El enlace: ttps://www.religiondigital.org/esperanza_radical/"

[Ramón Hernández Martín - 03 de mayo de 2019 - 09:07]

Insisto en que me resulta muy acogedor el pórtico de arcos del viejo santuario, estructurado casi como un torreón de defensa del misterio interior del templo. Quizá ello se deba a reminiscencias de peregrinaje en mi propia infancia. De niño, cuando el 7 de septiembre subíamos muchos serranos a la Peña de Francia, pasábamos la noche acurrucados en el claustro del que llamábamos "Pozo Verde". Noche de insomnio, de incomodidad, de frío, de velas encendidas y de rezos a la excelsa Señora. Seguramente, el pórtico de columnas de la foto fue refugio de miles de peregrinos a la Virgen del Camino. Hoy, los tiempos han cambiado una barbaridad: en cuanto a la Peña de Francia, apenas se camina a pie (salvo para hacer senderismo) y, desde luego, no se pasa allí una noche entera ateridos de frío y rezando; en cuanto a la Virgen del Camino, el Santuario hoy invita a todo peregrino (del espíritu, no de los pies, salvo a los transeúntes del Camino de Santiago) a adentrarse en un hermoso sepulcro cálido para ser catapultado a la hermosura de toda una resurrección artística y espiritual. Uno podría decir que el pasado sigue presente y que el futuro ya ha llegado.