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Antiguos alumnos dominicos VIRGEN DEL CAMINO - LEON

ROMERO Y MIEL

ROMERO  Y  MIEL

¡Ospá!. Vaya final de Navidades que ha habido en esta casa y en esta familia. Cienes y cienes de correos, llamadas, abrazos, felicitaciones, comentarios en el blog. No sabía que mi nietín era ya tan importante, aunque empiezo a darme cuenta. Y nos ha llegado, realmente nos ha llegado vuestro cariño, sí,  lo he sentido, me ha abrumado y no encuentro las palabras para poder expresarlo. Es algo difícil de explicar con mis malas palabras; pero vuestro apoyo ha estado soportando la nube en la que me encuentro navegando sin rumbo, como dormido, flotando, sin billete, sin revisor,  me cruzo con muchos globos blancos, sin saber si mi nube se deshará en gotas, si se evaporará o si me daré de bruces contra  el suelo, la realidad, aunque hoy la realidad me parece más hermosa. Y es que se está tan bien en esta nube…

Y se me ha ocurrido titular este comentario con el olor del Romero y el dulzor de la Miel que empalaga, pues así me siento de borracho.

Venga  Josemari, regresa  a la realidad,  céntrate y normalízate, si puedes.

Pero es que vaya final de Navidades que ha habido en esta casa y en esta familia.

Y me pregunto: ¿realmente nos merecemos recibir tanto cariño como nos habéis demostrado, de vosotros que sois maestros en  tantas cosas…?.  

Todavía en mi nube, gracias, mis amigos extraviados  pero nunca niños perdidos,  desde nuestro corazón, de Alexis, Alicia, Nacho, Isabel, desde mi  corazón,  desde el corazón de Alberto que es mucho más grande, y es que tengo ganas de llorar, ¡ospá!,  debe ser la humedad.

3 comentarios

Eugenio Cascón -

También yo me he enterado un poco tarde, querido Josemari, pero ahí va mi felicitación, preñada de todo lo bueno que se puede desear para el recién llegado y para todos vosotros.
Aún no he vivido esa experiencia, pero la entreveo como un renacer y recomenzar en la vida a través de ese montoncito de carne que palpita y día a día va definiendo su forma y adquiriendo parecidos (al menos, toda la parentela pretende adjudicárselos).
Que os sea placentero, a unos y a otros, el aprendizaje en el nuevo oficio de padres y abuelos, y con la sencillez y rotundidad con que la gente de pueblo manifestamos nuestros buenos deseos, ¡que se críe bien!

José Antonio -

José Mari, la llegada de Alexis a este nuestro mundo ha sido una alegría para todos nosotros, escribamos o no, esa es la verdad.
Su vida es un motivo más para viviar cada día agradecidos y con ilusión.
No sé decirte casi nada que ya no te hayan dicho, pero quiero expresarte, y expresaros a toda esa maravillosa familia, mi cariño y mi agradecimiento, mi cercanía y mi ilusión por tener de amigos a gente como vosotros.
Siempre estaremos cerca.
Muchas felicidades por esa paternidad, esa abuelez, esa tiez de Alberto.
Os deseo lo mejor para todo el año y para toda la vida. Os quiero mucho.
José Antonio.

Juan Carlos Cordero -

Querido Josemari:
¿Pero qué te creías? No te libras, no, sigue llorando un poquitín más, de emoción, y alegría y gratitud, ¡claro que sí! Pero ten cuidado que no se congele la lágrima y esa humedad que dices... con las bajísimas temperaturas que tenemos estos días.

Siento llegar un poco tarde, pero, aquí os envío a toda la familia mi enhorabuena por el nacimiento de Alexis. Que esa alegría que os ha traído a todos, y que se nos habéis contagiado, se prolongue siempre en su vida y en las vuestras.

Enhorabuena a los papás, a los abuelos, y a Alberto. ¡Menudo regalo de Reyes!
Menos mal que te conocemos bien, Josemari, pero por si acaso: coincidiendo a partir de ahora el cumpleaños de tu primer nieto con la noche de Reyes, no irás a hacer ¡el 2 x 1! (que luego van a decir de los de León...!

Muchas felicidades, y que Dios bendiga al crío recien nacido y a todos vosotros.
Besos y abrazos.