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Antiguos alumnos dominicos VIRGEN DEL CAMINO - LEON

PITU CALEYA

PITU CALEYA

Amigo Pitu, te han pillao. Es evidente que el autor premiado (Marce Iglesias) también escribe aunque no medie una editorial y un gran beneficio económico. Por eso escribe en este humilde blog donde escriben los humildes y proscritos, los genios y los mudos.

Para demostrarlo, nuestro compi Marce (así le llama la parte femenina de su familia y sus alumnos de Literatura) nos escribe este texto en tono menor, cuyo único motivo es la figura de nuestro Pitu. Es, me asegura, un modesto homenaje por los divertidos ratos que nos hace pasar con sus siempre ingeniosas y chispeantes colaboraciones.

Puede que desde Bruselas llegue algún reparo, puede. 


 

 

Pitu caleya (también astur o celta), sub especie casorvitensis

 Fama est que el pitu (y también la pita, claro) es omnívoro: en libertad —su medio natural: por eso se llaman de caleya— comen cuanto a su paso encuentran escargatando. La que no es tan conocida es la alimentación específica que vienen recibiendo en Casorvida desde tiempo inmemorial —al menos desde que a las tropas romanas se les ocurrió perderse por tales parajes payariegos y maravillarse por el prodigio: tal como puede comprobarse leyendo los anales de un historiador, no por menor menos fidedigno, llamado justamente Valetus Polla Llenensis— y el trato que les dan a sus pitos. Pasmaos, compañeros: selecto menú a base de jamón pata negra —el auténtico, no el de pata blanca ahumada para que dé el pego— y otras exquisiteces que orillo para no resultar prolijo: basta con la metonimia del jamón.

Por eso, cuando cualquier elemento — ¡y vaya elementos que da esa empinada tierra!— de tal sub especie ha de acudir a algún acto social, bien por gusto bien por compromiso, lo primero que consultan es el ágape post eventum: si no hay al menos el jamón de marras, o en su defecto marisco del Cantábrico (andariques, centollu, bugre) declinan la invitación alegando peregrinas excusas.

Como lo señalado ut supra pudo ser comprobado por quien escribe tanto el año anterior cuanto ayer mismo (del documento gráfico se ocupó mi colaborador y agente literario Pedrín, también conocido por Perico).

Por todo lo cual, doy fe y proclamo urbi et orbi la preclara excelencia del pitu caleya casorvitensis.

¿Comprendéis ahora, caros compañeros de reclusión en la paramera, por qué tanto ingenio, tanta chispa como la atesorada por el ejemplar por antonomasia — ¡y vaya ejemplar!—de tal pitu?

Y para que conste y sea de conocimiento público y nadie se llame a engaño, lo firmo, aquí en Oviedo, ciudad en la que resido (aunque para ver fútbol del bueno acudo al Molinón, ¿verdad, querido Luisín Heredia?).

 

N.B. Y aunque el ejemplar del que hablo cuente que el término pitu tiene otra etimología bien distinta, nun y faigáis ni putu casu: el pitu ye pitu caleya: libre, agudo, ingenioso, con esa pizca de picardía inconfundible que distingue a la especie. Y no le deis más vueltas.  

Marce Iglesias.

24 comentarios

Vibot -

Trapi, el primero, el último y el único.
Bien veo que pedí demasiado.
Un abrazo, salao!

Andrés Martínez Trapiello -

¿Dónde anda Anselma?, ¿estará con El Mudo?

Vibot -

¡Qué saludable sería escuchar esos gritos reprimidos, Trapi, o lo que necesite y sienta cada uno, gracias por ser el primero! Nunca olvidaré la naturalidad encantadora y el cariño con que acogiste mis confidencias.
Pregúntale a la Anselma que piensa de todo ésto, ella tan de la tierra.

Andrés Martínez Trapiello -

Hay silencios, querido Vibot, que son gritos.
¡Sé tú mismo!, nos decían en nuestros tiempos adolescentes; y a través de los años me lo he repetido infinidad de veces. Y ya con bastantes años vividos concluyes que lo importante en esta vida eres tú y a quien tienes al lado. Compruebas y corroboras también aquella creencia juvenil que transmitías a tu "dirección espiritual" en el que considerabas más importante el Segundo Mandamiento que el Sexto.
Besos, Vibot.

Vibot -

Otra vez el silencio.

Sin duda fuimos, somos y seremos una controvertida minoría. Pero no tan pequeña.
¿Dónde están las agallas para defender nuestro sitio en el mundo? Es que sólo Sarmiento y yo nos atrevemos a hablar?
Leo en el capítulo 1º de la segunda parte del libro de Federico Esteban Monasterio una cita de Cicerón que lo encabeza: "La verdad se corrompe tanto con la mentira como con el silencio".
Lo que llevo leído, Federico, es un valiente alegato, conmovedor y desgarrador, contra aquellos silencios. Y, sobre todo, contra aquellas palabras y aquellos hechos que tantos sufrimos respecto a los amores nacientes entre chicos.
Y las duras consecuencias de tantos silencios cómplices.
No sé como continuará la novela, pero su clarividente portada me hace temer lo peor:
junto a un lecho de pétalos de rosas, sobre un verde otoñal, hay una hostia del tamaño de un pan. Y sobre ella una araña siniestra. Negra e inexorable.

A uno le gustaría, como en esas películas que quizá hayáis visto, o en la vida real -"Todos somos Miguel Angel Blanco", o "Marta del Castillo"...- una ronda de solidaridad en la que todos, incluídos los más machotes y las chicas, se van poniendo de pie diciendo con los ojos brillantes de amistad verdadera: "Yo también soy gay".

De momento el silencio: ¿indiferencia, cobardía, incomprensión, desprecio?

Vibot -

Cirauqui, gracias. Me alegra mucho haberte servido de consuelo en horas bajas.
¿Sabes? (esto de "¿sabes?" era muy de aquellos escritos de la revista Camino, poemas y fragmentos de diario) ojalá nos dejen jubilar pronto -como era nuestra espectativa hasta hace bien poco- para que pudiéramos volver sin estorbos a aquella pasión por la escritura que nació en el colegio. Y así leerte en el blog con más frecuencia.
Me ha gustado saber por ti de Mendivil y de Ariztimuño...todos aquellos apellidos que eran chicos, miradas, palabras, sonrisas...camaradería leal, enemistades deportivas, alianzas de por vida como bien disfrutamos ahora, admiración, fascinación a veces, otras amor, amor hasta los tuétanos, inconfesable y sin embargo puro, inefable, hialino. Mancillado de torvas teologías... cercanos o lejanos compañeros de penas y alegrías.Inolvidables en aquel fulgor irretornable de la adolescencia. Entre nieblas del páramo o risas y secretos en el verdor de El Valle.
El Valle...ardiente y rumoroso de frescor sólo en nuestra memoria melancólica, pues que no existe ya, como aquellos que fuimos. Idealizado tras de sus celosías de zarzamoras, sus guirnaldas prerrafalitas de lúpulo y rosales silvestres -la ingenua y ruborosa zarzarrosa (rosa canina), rosa de mayo, rosa agrestis, rosa arvensis, rosa gallica, rosa glauca, rosa junzillii, rosa mosqueta (rosa sempervirens), rosa micrantha, rosal alpino (rosa pendulina), rosa pimpinela, rosa rugosa, rosa rubiginosa(eglantina roja), rosa stylosa, rosa tomentosa, rosa villosa...-
¡Qué aleteo y que tormento de rosas en el aire de entonces!
mientras las huellas de nuestros pies inquietos se hundían en un barro perfumado de berros, trebolares en flor y aromas de leyenda.
Y... entre los algodones voladores de los chopos... las hojas de cicuta que debimos morder después del beso. Aquel que nunca dimos y aún nos duele.

Mariángeles -

He leido este escrito de Javier Cirauqui lleno de una sensibilidad exquisita y ¿dolorosa?,no sé si soy yo,ó el escrito pero me siento "acongojada",será por esa repetición de "colgarse" sea por lo que sea,Javier te felicito,llegas a lo más hondo del alma.....Un besin.Mariángeles

Javier Cirauqui -

Llevo días intentando colgarme, para contestar a las preguntas, que me hacía Vibot, en una de sus entradas o cuelgues y entre que no tengo practicamente tiempo y entre que este negocio mío crece y aumenta cada día más,
a causa de la crisis y el frío.
Cada día está más dificil, eso de colgarse, pues no encuentras ni el tiempo, ni el lugar adecuado para ello´.
Desde que he intentado colgarme, han pasado múltiples situaciones para hacerlo: trotadas alrededor de la finca, las disquisiciones sobre el kilometraje y los trayectos realizados... He descubierto que había un cementerio en el Colegio, yo no se si no me enteré en su tiempo o se me había olvidado. Mi primera noticia fuen en el Encuentro del 2007, que alguien dijo de ir al camposanto y yo no lo hice.
Para mí, la Escuela Menor, era uno de los misterios mejor guardados de la Virgen del Camino, (casi con siete llaves), ya que vine de Villava y pasé directamente a la Escuela Mayor. Siempre he tenido una verdadera curiosidads, por saber de aquellos arcanos secretos que se encerraban allí.
Sí, me acuerdo de aquellas horas de deporte que hacíamos, rotando por todas las especialidades, con una camiseta de tirantes y unos pantalones cortos, no me acuerdo de si eran negros o azules y si me acuerdo que hacía un frío, "que se cagabba lorito" como decían en micasa. Algunos rizaban el rizo y decían que era un viento frío y sano, que venía de los Picos de Europa, no era ni frío, ni sano, sino helado y gélido. Mientras que un altavoz de la recreación, desgranaba unas consignas, que decían algo así como: "Mens sana in corpore sano" y yo pensaba, en mis adentros que más bien debían decir: Mens morta in corpore sepulto".
Sí recuerdo, que en sexto, después de una rebelión en las aulas o una plantada estudiantil, por un "ju is ji" mal entonado, estuvimos en un largo pasillo, en dob le genuflexión, osease con ambas rodillas en el puto suelo y con los brazos extendidos a lo ancho, osease en cruz, cual aspas de molino entumecidas por un cabrito dolor y además expuestos a las miradas indiscretas y cotillas de todo el que pasaba, en doble fila, por aquel pasillo interminable.
Y para postre, en los recreos, dimos innumerables vueltas al campo de fútbol, (no a la finca creo). Debieron ser tan innumerables que las caras apostólicas de 6º, denotaban fuerte cansancio y extenuación, algunos no podían más y se paraban:"¿jagüar yu?, ¿jagüar yu?"." Más descojonao que tu".
Tengo que decir que este cuelgue era demasiado, para mí, y fueron pasando patatas enormes, no sé si reales o ficticias de La Cepeda y otros sitios. Tubérculos de un tamaño gigantesco y todo el mundo haciendo alarde de quién la tenía más grande (la patata). Este cuelgue tampoco me sedujo, ya que nunca me ha gustado competir.
Compañeros, como Federico, (un saludo), que entran por primera vez en en el blog, premios a novelistas, como Marce Iglesias, su presentación en Oviedo, retablos, mono de Justino, semblanza del P. Morán, entrañable P. Morán de Manzaneda.
Me cuelgo, por fín, entre gallinas, gallos, pitus caleyas, entre trenes y pitus, presentaciones y escritos. Al leer por primera vez el título pensé: Qué elegantes el Pitu y Señora otoñeando en Callella.
Qué dificil es colgarse y acertar donde, por eso me cuelgo donde puedo, donde llego y donde me da la gana.
Pero a través de tanto cuelgue he llegado a la conclusión que si es dificil colgarse. es mucho más dificil descolgarse y sobre todo descolgarse de este blog.
Felicidades en el día de tu cumpleaños, Javier "El Ministro", que seas tan feliz y que lo pases tan bien, como nos lo hiciste pasar, a todos nosotros, en Salamanca. Que cumplas muchos más.
Y después de este peñazo voy a lo mío, que es contestarle a Vibot, lo que me pedía en su cuelgue: Lo del "cónclave entre los discípulos del P. Iparraguirre y lo de los seudónimos, obligado por el P. Iparraguirre", no es ningún reproche hacia él, puesto que en aquellos años, por lo menos yo, era incapaz de reprocharle nada a ningún profesor del Colegio. Es una manera de hablar, porque sí que había discípulos del P. Iparraguirre, generalmente de 5º o 6º, que escribíamos en Camino, o actuaban en los autos sacramentales. Yo nunca actúe en un auto sacramental, a mí se me reservaba para presentarlo, por ejemplo el día de Santo Tomás, para montar una velada o acto para las monjas, el día de la Beata Imelda Lambertini, o para escribir o poner voz a los guiones radiofónicos que dirigía y algunos también escribía, el P. Huarte. Yo pensaba que no me ponían de actor, porque tenía acné juvenil y en la cara más granos que una paella y eso por lo visto, era antiestético. Algún día os hablaré de esta época y del proceso de mi creación literaria en el Colergio.
Respecto a los seudónimos, el P. Iparraguirre me indicaba, que me los pusiera y yo entendía que era tal mi interés por la escritura, (algo que ya me venía desde Villava), que cuando me devolvía los escritos pasra corregirlos, cargados de puntos suspensivos... Yo le mandaba otro escrito pensando que era mejor que el anterior y despues de muchas correcciones (El Padre Iparraguirre era muy dificil y exigente), me publicaba los dos uno con seudónimo y otro con Cirauqui. Que yo recuerde tuve varios seudónimos, entre ellos: Alpes, Mirador y el auténtico Cirauqui.
Mendivil era un gran deportista y un buen músico. Ahora se dedica a la Hacienda y hace poco estuvo nominado para el puesto de Presidente de la Cámara de Comptos de Navarra, hacienda histórica y actual de Navarra, pero no fue elegido por alguna incompatibilidad.
A los pocos años de salirnos del Colegio, fui a una Academia, para prepararme a unas oposiciones de Banca y me encontré con Tomás Mendivil, que me impartía clases de Derecho y Cultura General. Había terminado la carrera de Derecho.
Lo de la V y la F tuvo su época dorada, entre los del 59, pues creo que el P. Morán en francés y algún otro profesor de Lenguas, nos inculcaron que la v se pronunciaba labiodental y allí nos tienes, a todo el curso, pronunciando "fisnamente" pronunciando la v como f, la mayoría con regodeo y recochineo, que no con pedantería. Así recuerdo que las coplas de Santa Teresa se convertían en:
Fifo sin fifir en mí
y tan alta fida espero,
que muero porque no muero.
Y para terminar voy a comentarte mis impresiones sobre sobre tu escrito del Concierto de Año Nuevo del 2.008. Desde antes del Encuentro del 2007, en la Virgen del Camino, mi hermano Antonio Juan, límite, pero sin límites en el amor, estaba ingresado en el Hospital de Navarra y yo llevaba varios meses por la noche, en el Hospital o trabajando, pues mi hermana y yo le acompañábamos permanentemente.
El día de Nochevieja, me tocaba trabajar, fui directo desde el Hospital al trabajo, cena especial con los usuarios. Hay que decir que no son los mejores días para ellos. Yo me encontraba sereno, pero muy triste y dolorido. A la noche estuve ojeando el blog, leyendo cosas pasadas, que no conocía, ya que no comencé a colaborar hasta el Encuentro de Villava. Pasó la noche, y a la mañana siguiente me llamó mi hermana, para que no fuera al hospital a la mañana y pidiera los días libres que me correspondieran, pues ella no podía quedarse sóla a la noche. Así lo hice y me fui a casa.
En estos días de tristeza y dolor siempre he necesitado y buscado encontrar algo bello como: visitar un monumento, escuchar musica hermosa, leer un libro o un poema, contemplar un cuadro, etc. Y cuando llegué a casa este algo bello lo encontré en tu escrito sobre el concierto del Año Nuevo, que yo escuchaba en casa. Lo leí, lo releí y me sentí a gusto, pues necesitaba algo que llegara a mis sentimientos. Vibot, gracias por tu escrito.
Me he alargado tanto que termino. Un saludo a todos.
Javier.

Martín -

Felicidades Marce espero que la racha continúe.
A propósito, nadie habla de tu yeguada……………… ¡tampoco fue mala! o ¿fue la mejor? (Pitu toma nota).

Luis Heredia -

Marce, qué pena no haber estado contigo para felicitarte personalmente. Para otro premio será, seguro. Me perdí hasta los pinchos pero eso ya se daba por añadidura con la asistencia al evento de triperos de primero y segundo orden. Algunos cursos del Colegio, como habrás observado, son los primeros en todo.

Luis Heredia -

¡Ojo¡ Se acaba de meter un virus en este portal que dice llamarse luis heredia. Lo he descubierto por sus faltas de ortografía pues escribe su nombre con minúsculas. Lo pondré en conocimento de luis heredia por si esta usurpación de personalidad fuera perseguible de oficio o si al verdadero le interesa perseguirle.

Tened cuidado porque se puede introducir en cualquiera otro de vosotros y a mi no me llameis para que os ayude porque yo, de delitos informáticos, estoy pez como la playa de Bañugues: sin almejes

Ana -

¿Cumple años el ministro y no invita a unos prietos?? Me da en la nariz que se hace el longuis porque el presi le ha destituido y ahora su ministerio lo ocupa otro (¿El Mudo?), y para evitar condolencias se escaquea.

Javivi, no te hagas el loco, si me aludes como centolla te cambio chuletón por mariscada, que va mejor con un blanco si es que te da miedo lo del prieto picudo...

Jesús Herrero -

Por cierto, Pitu, me acabo de dar cuenta que tienes (en la foto de arriba) el mismo flequillo que yo cuando era joven. A mí me lo robaron una noche en Las Caldas. ¿No andarías tú por allí, casualmente?

Jesús Herrero -

Vibot, coño, no me le llames guapo al señor Ministro. A su recia estampa no le queda bien y el Pitu, o el Antonio, pueden aprovecharse de la circunstancia y hacer sangre en la del 61. Este blog se ha puesto feroz. Tiene uno que ir mirando donde pisa porque lo que crees que es una piedra un poco rara, resultan ser los afilados dientes de la bocaza de un cocodrilo hambriento. Menos mal que Fresno, a quien no veo desde hace 50 años, es amiguete y además dentista y sabe arreglar estas cosas.

Ya lo dije hace unos días: La del 61 está empezando a cumplir 61. ¡A ver, quién mueve ficha…! Ministro, si te faltara hoy (perdona el retraso) mi felicitación, estaríamos cojos. Felicidades. Antes de que cumplas el siguiente ya nos habremos visto. Abrazos y también felicidades a la familia por tenerte al lado.

La verdad, Pitu, (por otro lado), es que Marce escribe bien el tío. Pero no veo yo que tú seas menos, sobre todo en cantidad (que en este caso no es negativo), y además tienes más hambre, lo que de alguna manera te acerca mucho a mí, (mal que te pese). Tú sigue dándole al teclado y verás como al final escribe hasta el Mudo, aunque sea en silencio. Pitu, no me malinterpretes, la coba que te doy es sincera, sentida, no me leas entre líneas, no pienses ¡qué estará tramando este tío! (La verdad es que hoy me siento algo raro, lo reconozco, pero el día ha salido así…).

Javivi, ya he metido en la máquina una tarjeta de memoria de 4 gigas. ¿Habrá suficiente para lo de los huevos? Espero que sí. De fondo pondremos algún paisaje de Castro para que quede bonito y luego la colgamos donde el ínclito Furriel, para que lo vea todo el mundo, incluso el mudo, que en este caso tendrá motivos para estarse callado.

San Jose -

Javier, Ministro, muchas felicidades. Que pases un dia muy feliz en compañía (física o espiritual) de todos los que te queremos.

Vibot -

Marce, gracias por escribir también aquí, por no olvidarnos. ¡Que siga la alegría de tu celebración!
A esgaya, como dice Javivi.

Ministro, guapo, un abrazo muy fuerte. No te hagas nunca viejo, tú ya sabes.

Pedro López Llorente -

El PITU, Marce, no es el "de caleya", aunque tenga las características que tú citas: libre, agudo, ingenioso...
El "PITU", es de la vía, del tren. (No de la Gran Vía). Y lo llaman así desde el 59 en la "Paramera", cuando en una clase, me parece que con el P. Ricardo, preguntó el fraile qué era lo más importante de los trenes, unos decían la máquina, otros los vagones, otros la vía y otro dijo: "el pitu" y todos se escojonaron de risa.
Y lo dijo, porque el tren cuando pasaba por Casorvida y dividía al pueblo en dos partes, siempre pitaba y para él era lo más importante, "EL PITU".

Lo de los pinchos que llevamos después de la celebración, para seguir comiendo mientras jugábamos la partida, ya se los devolvimos a la vicerectora. Lo que no pudimos devolver fue la botella de vino, que no era Prieto Picudo.

Javi, Ministro, muchas felicidades y que pases un día maravilloso, con tu familia y amigos.

luis heredia -

Anda, Pit, tú lo que querías es que quedase constancia de tu intervención paa no dejar lugar a dudas.

JOSE MANUEL GARCÍA VALDES -

Me había dado error por lo que pensé que no había salido el primer escrito. Pido disculpas por la repe.

JOSE MANUEL GARCÍA VALDES -

Que nadie se confunda, Marcelino es tan humilde que quiere desviar la atención, como Zapatero con el cambio de gobierno, para que no se hable de él. Yo no pinto ná esn este festín. Los protagonistas sois tú y Armando que os rompéis el seso y el sexo para escribir historias guapas. El caso es que esto de escribir no se transmite por contagio porque yo estuve al lado de Armando muchos años y sigo como el primer día.
Si yo soy el pitu caleya tú eres el gallo de la quintana. Pro no olvides que cuando sea mayor y haya aprendido el oficio de escribiente te dedicaré alguna égloga.
Y hablando de pitu y centollos ¿No estaría bien que un día nos dieramos un festín a base de tales? Habla con Pedrín, el organizador.
Un abrazo

JOSE MANUEL GARCÍA VALDES -

¡Ya verás cuando me haga mayor y aprenda a escribir como tú! Oye, ¡y qué bueno sería poder ir un día a comernos uno de verdad! Habría que estudialo, habla con Pedrín.
Si yo soy el pitu, tú eres el gallo de la quintana.
Ya te queda poco para pasar a la empresona de las clases pasivas, después habrá que parate pa que nun escribas demasiao. De momento estamo contentos de que hayas bajado a la arena de los humildes.
Que nadie se confunda, los protagonistas son él y Aramando que se rompen el seso y el sexo para escribir historias guapas. Seguid así.
Un abrazo

Carlos-Bañugues -

Perermite Marce, que en este espacio dedicado a ti(¿o al Pitu?)despegue con una noticia que no tiene que ver,en absoluto,con el éxito de tu obra y tu importancia literaria.Sobre ésto,disculparme porque no pude acompañarte como era mi intención.Te aseguro que me fue imposible.

Cuelo,con el permiso de todos,el recordatorio de que,en el dia de hoy(27),cumple añitos nuestro MINISTRO.Por rango,cariño,incansable trabajador y toda clase de méritos,se merece una felicitación colectiva y entrañable. Yo se la mando llena de cuelgas,música y cariño..¿Te acuerdas,Javier?
Un abrazo muy fuerte.
(Estos de tu curso no se enteran ni a través de tu secretario..)

Javier del Vigo -

Eres, Josemari, un "pelotari" (en vasco, aquel que juega con pelotas, como sabes...)en este debate que se avecina.

Sin que sirva de precedente, yo me decanto por el Pitu.

¿Por qué?

Entre otras razones, porque si no le hubiera "tocau les pelotes" Pitu a Marce, Marce seguiría alineado con el Mudo, que no habla ni cuando se produce el milagro de la enorme patata de Manolo.

Además, Marce, qué "oño" es este galimatías que escribes: pitu, pita, pitos, putu, caleya, "Boletus" Polla Llenensis, andariques...? En todo caso, compañero Marce, ahora que estarás de relax, vendiendo y vendiendo "a esgaya" (¿se dice así, "principescos" del Principado), cuantos estaríamos satis - fechísimos leyendo tus recuerdos de aquellos tiempos de "reclusión en la paramera", esos años intermedios que apenas ocupan 40 años de silencios en nuestras vidas, tu presente..., con esa gracia y salero que intuyo en el texto "ut supra"!

¡Ánimo, jovenzuelo, te espero en nuevas remesas de literatura en estado puro!

Una puntualización fuera de "portillo". Ahí abajo, la otra tarde, Ana Centolla (de la Centeno Oil Company) alude a los "atributos" faroleros y bilbainos de un tal Javivi... ¡Manda patatas! ¿Puede haber monstruo tan milagroso como ese Javivi que se quería ver los dedos de los pies cuando niño y sólo veía huevos de avestruz, cortocircuitando la visual?

Ximo, ¿tú puedes hacer un diagnóstico de ojos -los de Javivi, que debía ser "hipermétrope" si nos atenemos a la literatura de Ana- o tu experiencia profesional llega sólo a la boca de la supradicha, que más parece "bocarón" bilbaino que progenie de la honrosa casta de las patatas de los Centenos cepedanos?

En fin, Jesús, que si quieres tener real constancia del tamaño de los atributos del farol bilbaino, te sugiero: busca la cámara que tenga el tele - objetivo más grande, para que, con la ampliación que le hagas en el potochop, logremos ver "algo" a través de este blog.

¡Si es que somos tan poca cosa...!

Marce, si puedo elegir para celebrar tus éxitos, me quedo con un bugre con buenas pinzas y mejor rabo. Aunque no hago ascos a la buena almeja de Bañugues o a esos percebes de Puerto de Vega. Aunque soy fácil: unas patatas de La Cepeda y un buen txakolí de Getaria me sobran, si algún día hacemos un "vis a vis".

¡Salud, chavalería!

Andrés Martínez Trapiello -

Una curiosidad: Lo que hay en esas copas que apuñan, que sujetan con cariño ¿es Prieto Picudo?