POR FIN TRIUNFA LA MUJER
¿Alguien lo dudaba?. Mi querido amigo y admirado maestro-músico-poeta-barroco-artista-romántico Santos Vibot me envía las fotografías prometidas de la obra "POR FIN TRIUNFA LA MUJER" de la Compañía "Madrid Goyesco"que dirige Germán Torrellas.
Qué mejor artículo para describir las fotografías que me ha enviado, y que coloco en el álbum Ver Fotos/Documentos Post-REENCUENTRO, que su propio comentario en el blog, que aquí os transcribo. (Me admira tu minuciosa descripción).
Besines cariñosos para Ingartze y Germanes (Senior y Junior) con el cariño de todos vuestros amigos reencontrados, ¡¡nuestros queridos Torrellas!!.
Para mi querido Santos, un beso picante de tu "guindilla".
Aunque sea tarde -pero dentro de la octava- tengo que deciros a todos los que os gusta la música, que el viernes pasado estuve en una representación de la compañía "Madrid Goyesco" que dirige Germán Torrellas. Se titulaba "Por fin triunfa la mujer". Y eran dos Tonadillas escénicas del siglo XVIII, de Blas de la Serna.
El decorado era delicioso, los trajes eran de lujo, sobre todo los de Ingartze, con unos escotes muy estilosos, los favorecedores e incitantes talles altos, las orladas colas en encaje de oro, las sortijas de embrujados destellos... y una undosa peluca en cascada con la que estaba guapísima.
La interpretación dramática estupenda y muy divertida. Tendríais que haber visto los levantamientos de ceja derecha de Ingartze, los quiebros de abanico y los mohines -lunar incluído- con los que me tiraba los tejos a mí, que estaba en primera fila, para encelar a su marido -también en la ficción- Germán, que estuvo muy gracioso haciendo su papel al mismo tiempo de machista y de calzonazos, con una casaca rosada y los ojos pintados como una loba.
Había 5 músicos en vivo. Dos violines, un oboe, Germán junior al cello -seguro e impecable- y un tañedor de castañuelas completamente exquisito en su precisión, pulcritud y salero musical.
La oboista y la chica violinista iban tavestidas de chicos, con sus medias blancas hasta la rodilla, su calzón masculino dieciochesco, el chalequito floreado ceñido y el pelo recogido. Dos guapas y ambiguas jovencitas.
La interpretación musical fue también una gozada de naturalidad y frescura.
Invité a 6 o 7 amigos, incluídos Pedro y Joseluis, pero ¡vaya por Dios, tenían compromisos! En Madrid -y en todas partes- nos pasamos la vida perdiéndonos cosas.
Espero que algún día podamos disfrutar todos de estas estupendas Tonadillas en la inolvidable versión de nuestros amigos. Torrellas hasta tocó la guitarra antigua en una Tirana en la que casi se veían y sentían los aromas y suspiros de unos bailarines ataviados de majos en la pradera de San Isidro, idealizados de estío y parasoles verdes en un tapiz de Goya. Limonada en sorbete refulgiendo en el sol de una fiesta de músicas felices.
Gracias, chicos Torrellas.
3 comentarios
Germán Torrellas -
Lo cierto es que la función es muy divertida y disfrutamos mucho haciéndola, si no como lobas si al menos como perros, enanos, eso sí, y la música es más enjundiosa y jugosa de lo que parece.
En fin, estáis todos invitados, por supuesto, si conseguimos llevarla de gira por las españas de Dios.
Sigo ahí con vosotros aunque no dé señales de vida. Nuestro amor imposible ya ha superado todas las barreras materiales y espirituales y nos regocijamos en él cual querubes del edén...
Baldomero: si me lees te recuerdo que te ofreciste amablemente a pasarme la música de Don Joaquín. Yo podría editarla para pasársela a los que están interesados que son legión.
Un fuerte abrazo.
Mariano Estrada -
Un abrazo
Máximo Olóriz -
Germán lleva ya muchos años haciendo buena música y haciéndola muy bien. Tuve ocasión de verle varias veces con Neocantes, cuando cantaban a Guerrero y compañía. Recuerdo, por ejemplo, aquel "Virgen bendita", de Escobar, que también cantábamos en León.
Germán, a ver si cumples tu palabra de traer esa representación a Corella, pueblo natal de Blas de La Serna. Suerte y mucho éxito.