CONFIESO MIS PECADOS

Además de haber aceptado la vara de mando que aún no he abonado a Jesusito Herrero (del verbo abonar de pagar, no de fertilizar) me confieso ante vosotros, hermanos, pues he pecado mayormente de obra, soy un corrupto, me he dejado corromper por los cantos de sirenas (dos de ellas, sobretodo la rubia, estaban de miedo) y las pompas de este mundo.

Avergonzado reconozco ante todos vosotros que he aceptado en mi condición de furriel unos regalos que pueden convertirse en imputación por cohecho impropio.

Dejo a vuestro criterio la sentencia que merezca y prometo no volver a aceptar regalo alguno que no sobrepase los 1000 €.

 

Acepté de Santines Vibot este pequeño  cuadro con la representación de CAROLUS DURÁN Un poéte á la mandolíne. 

 

Antonio Fueyo me tentó y caí, me pintó y regaló esta bonita acuarela y, claro, yo, en vez de rechazarla pues la colgué en la salita de estar en un huequín que me quedaba un poco soso en la pared del fondo y que yo andaba buscando algo que le fuera. Y allí sigue colgada.

 

Y de nuevo Jesusito Herrero me hizo pecar aceptando esta reproducción del Antifonario Visigótico Mozárabe de la Catedral de León. Que conste que mi intención era devolverla, pero como aún no he podido descifrar la notación musical (visigótica) sin pentagrama, pues me ha dado un no sé qué el hacerlo. 

 

Obnuvilado, lo reconozco, me cegó el vicio y acepté torpemente este frasco de cerezas con orujo que me regaló Pepito Sánchez el nuestro. Por cierto, están cojonudas.

Aparte de las propiedades inmobiliarias y cantidades en metálico que con regularidad me enviáis y que no me parece necesario detallar y de las que disfruto con muchos remordimientos internos y pocos externos.

Mea culpa, mea culpa, mea mediana culpa, pero sed indulgentes, porfa, porque el camión de mandolinas que me había quedado ya lo devolví al museo metropolitano de Casorvida.

Con todo el dolor de mi alma he resuelto no volver a pecar, depende del artículo.

PROMETO devolverlo todo, pero, al menos dejadme las cerezas, que ya quedan pocas y están de muerte.

Cumpliré la penitencia durante los próximos 15 días en Cádiz donde flagelarme al viento de levante.

4 comentarios

[Jesús Herrero Marcos - 03 de junio de 2013 - 11:55]

Recristocoñes, qué lío habéis montado con las ves y las uves, que lo ves y me hentra la risa floja, que no he parado de reír desde hace medias noches, perdón, media hora. Hahora me explico porké estoi sin hordenador desde el viernes y es que se le debe de haber caído una ube del teclado sobre algún relé de las tripas y a echo contacto con algún cable de esos de colores y la emos jodido, hablando en plata.
Furri, no ace falta que te las des de pecador. Ya sabémos que tratas de desviar la atención hacia las naderias como hacen Pitu y Pedrín. ¿Onde excondes lo gordo? ¿eh? Ponlo hencima de la mesa si tienes lo que ahí que tener. Cuando lo cuentes ablare con su señoria para que decida lo de la pena y da gracias que lo he puesto en femenino y no en masculino, que es lo que me apetecia.

[jose ignacio - 02 de junio de 2013 - 22:15]

Luis, qué razón y mesura tienes.

Has ponderado con justicia la penitencia merecida para los cohechos confesos propios e impropios de nuestro furriel. Se te nota el derecho.

Aunque yo no tenga la cabecina bien, puedo decir y digo que este blog si no existiera habría que inventarlo, por la memoria y por la historia niños inocentes.

[José Mª Sierra Tascón - 02 de junio de 2013 - 15:28]

Me pilláis a unas horas que no son de penitencia, sino de descanso. No sé en La Paramera a qué correspondían: Maitines, no; completas, tampoco, serían vísperas. Y digo, me pilláis, porque me dejo pillar. Esto lo podría haber escrito a las seis de la mañana cuando el espíritu, no el de todos, no tiene la inclinación natural al pecado, sino es el de la gula del desayuno.
Con sus pocas fartas de hortografía, Luis te perdona: Llo furri, pod hirte a Kadid, te himpongo; tres pescaítos elebados al cuvo ha dyario, rregados con hun gerezito, todo eyo, olles, en tablao flamencko con acompañamihento de mandolina... Y ke haproveche.

[Luis Heredia - 31 de mayo de 2013 - 23:09]

Pues sí que hacía bastante que no te confesabas, ca..radura. Esperaste a veverte - la moda es cambiar las v por b y bicebersa como hiciste tú con la bara- todo el orujo para pedir perdón y hacer un acto de contricción.
En el pecado llebarás la penitencia:

Veverás tres tarros de orujo al día,sin cerezas, durante tu estancia en Cádiz;

Debolberás, aunque no lo quieras, tres beces al día los tres tarros después de veverlos y

Tocarás las pelotas al personal tres beces al día por las mañanas cantando "Las Mañanitas" sin mandolina, a pelo.

Esto te reconfortará y no bolberás a confesarte, al menos, hasta que te buelbas a encontrar con los que te indujeron a cometer estos pecados.

A lo tonto a lo tonto, a ber si empiezo yo ahora a cometer faltas de hortografía. Ortografía ba sin ache. ¿Pensásteis que me iváis a cojer?