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Antiguos alumnos dominicos VIRGEN DEL CAMINO - LEON

EL VIEJO SANTUARIO EN COLOR

EL VIEJO SANTUARIO EN COLOR

Eran los años cuarenta cuando comenzaron las obras para levantar una segunda torre en el Santuario de la Virgen del camino, gemela de la que ya existía, en la cual brillaba todas las noches una potente luz que se veía desde cualquier lugar de la ciudad de León.

Alrededor del Santuario, galerías que eran albergue de caballerías y transeúntes pobres, que allí hacían lumbre y llenaban el recinto de suciedad, por lo que fue necesario cerrarlas con verjas de hierro en tiempo del obispo don José Álvarez Miranda.

En los años sesenta, fray Arturo Álvarez, O.F.M., nos decía:
«Allá quedó, como un capítulo de historia, el viejo templo. Sólo el lugar se respetó y únicamente perduran, de él, la imagen de la Virgen y su encuadre tradicional: el retablo que labraran, en 1731, Pedro y Antonio de Valladolid. Todo lo demás cayó, bajó la pica revolucionaria de la...evolución...

El arquitecto sabe que León tardará en aceptarlo y muchos jamás lo comprenderán; que la gente estaba acostumbrada al otro templo; que éste choca con el viejo camino romero, con una ciudad cuajada de arte clásico, con la humilde sencillez del pueblo de fe añeja, al que la nueva arquitectura difícilmente hablará con lenguaje a su alcance... Pero no importa. A la luz de una idea funcional comienza el nuevo santuario, en abril de 1957.

nota.- foto y texto encontrado fisgando por Internet.

23 comentarios

Santos Suárez Santamarta -

Baldo, no andes con fullerías. Explica el origen de la décima que antecede y restituye el original. Todos se han dado cuenta del contravalor en el que has incurrido. Otrosí digo:

No me puedo imaginar
a alguien leyendo el blog,
-tras muchos años- qué shock
le pudiera ocasionar
si quisiera interpretar
como veraz lo leído.
Ante tanto enredo urdido
y ante tanto disparate
dudara ser un orate
o estar Baldo poseído

BALDO -

Santines, hermano. Es tal el arte que tienes de la versificación que el Mester de Juglaría, el Mester de Clerecía, los versolaris vascos y los poetas andaluces todos juntos nunca podrían igualarse contigo. Por eso te encomiendo una cosa, sabedor de que en 3 o 17 horas la tienes más que lista. Siempre le he tenido ganas al Padre Isla, jesuita profeso. Este leonés, aunque nacido accidentalmente en Vidanes (cerca de Cistierna), pasó su infancia y adolescencia en la villa de Valderas, de donde era oriunda su madre. Como en Salamanca, donde estudió, no tenía altura epistémica para batirse con los dominicos en las questiones disputatae, urdió una farsa burlesca e irónica contra ellos con cuentos y chascarrillos para ponerlos en ridículo en la figura del famoso predicador fray Gerundio de Campazas, alias Zotes. Vendió 1500 libros en tres días. Menos mal que la Inquisición, coto privado de los Predicadores, entró rápidamente en acción y la prohibió. También el Santo Tribunal tardó poco en cazar y prohibir la segunda parte de la sátira antidominicana, que el susodicho Isla había editado clandestinamente en el exilio. Sabes que Campazas raya con Villaquejida (los separa el río Esla, precisamente donde Montemayor sitúa a su zagala Diana) y ambos están a tiro de piedra de Valderas. Te puedo dar el título y el argumento: Las andanzas amorosas del P. Isla, alias Pollino, con una sobrina un tanto casquivana del Deán de la catedral de León, que vivía en la calle de la Pícara Justina. Con estos datos, tú compones una obra maestra como El Lazarillo de Tormes o como La Celestina. Puedes tutearte con Fernando de Rojas, que sabe de tus artes, y decirle, por ejemplo:

A mí, Fernando, amigo,
paréceme nadería,
pues todo el mundo podría
mejorar cuanto yo digo.
No hay que juzgar por un higo
la bonanza de una higuera.
A ti en cambio te dijera,
viendo tu capacidad,
que no admites igualdad
ni te hace sombra cualquiera.
(Santos Suárez Santamarta)

BALDO -

I.
Querido Luisín. Tengo que decirte, en primer lugar, que me has confirmado en mi inicial sospecha de que tú eras el “negro cervantino” de la Academia Platónica de Casorvía. Dije que el Casorvidense utilizaba la comicidad, la sátira, la parodia y la burla contra mi adscripción chavarriana y, sobre todo, que identificaba mi figura con el personaje de Alonso Quijano como hacedor de discursos extemporáneos, fuera de lugar, que los leen pocos y no interesan a nadie. El Casorvidense hablaba por boca de ganso cervantino. Ahora ya lo muestras tú sin tapujos: “Hete de decir, querido Baldo, antes que nada, que me gustan más tus deposiciones cuando son solo tuyas que cuando ejerces de discípulo de Chávarri. Las encuentro más frescas y originales, aunque sigan encaminadas a socavar algunos cimientos que tienes en tu punto de mira. Siendo gran valedor del Casorvidense…”. Hete de decir, querido Luisín, después de este renuncio en que te he pillado, que, si tuviera que escoger entre ser Lazarillo de Eladio o Regidor de la Ínsula Global, con poder para dar leyes y meter en prisión a quien me placiere, me quedaba a ojos ciegas con lo primero. Para explicarte mi postura y actitud voy a contarte lo que me ha sucedido no hace mucho tiempo. Revolviendo en las cuatro cajas de manuscritos que tengo de Eladio, encontré uno en el que no había reparado en ocasiones anteriores por considerar que eran una sarta de deducciones con símbolos de lógica matemática que llenaban un montón de folios. Pero no. Llevaban adosado por la parte de atrás un palimpsesto en castellano, que explicaba todo, o casi todo.

II.
Por cierto; estaba vaporizando la mascarilla con colonia, como me había aconsejado la farmacéutica, y el nebulizador arrojó algún vapor sobre el susodicho palimpsesto, y cuál no sería mi sorpresa cuando vi que aparecía una parte muy pequeña del texto primitivo del Diario de Navarra. Se conoce que la colonia había disuelto la pócima que el machiguenga había elaborado para “palimpsestear” el periódico. Pues bien, allí había una noticia, en un pequeño recuadro, sobre Zoco y María Ostiz. Se decía que ésta había pertenecido a las Hermanas Disolutas de San Fermín antes de convertirse a la Iglesia de los Testigos de Jehová. De Zoco afirmaba el gacetillero que era agnóstico tirando a ateo y que ambos habían mantenido el paripé para que, con la coyunda y el ayuntamiento, no se extinguiera la raza navarrica. ¡Vaya Ud. a saber!

III.
Pero volvamos al palimpsesto. El machiguenga machaca de Iráizoz cuenta en él que en cierta ocasión peregrinó a la ciudadela inca de Machu Picchu y cuando llegó, como la noche ya se le venía encima, buscó una de las cuevas que hay por los alrededores y entró hasta el fondo en una que llamaban Narmuq, habitada en otro tiempo por una secta religiosa llamada “soinese”, con el fin de descansar y por ver si encontraba alguna alimaña para llevarse a la boca. Cuando aclaraba el día y se iba iluminando la cueva, descubrió unas vasijas de barro sin apertura. Rompió una y se encontró con unos papiros, escritos unos en machiguenga y otros en quechua. También partió las demás vasijas, hizo un hatillo y se los llevó todos consigo. Cuando bajó de la montaña sagrada se dirigió a la misión dominicana de Quillabamba, a donde le había enviado Iráizoz, necesitado de algunos dineros, de los que el prior, siempre generoso con él, le proveía muy a menudo y en abundancia. Pero hete aquí que se encontró en uno de los claustros con fray Vicente Suárez, de Blimea, que, preguntándole por derecho al indito qué portaba en aquel hatillo, este le contó la historia con pelos y señales. Ni corto ni perezoso, fray Vicente le ofreció dejar los manuscritos en la biblioteca del convento y que el machiguenga se llevara unas fotocopias, que el fraile le hizo con todo esmero y celeridad. No se habló más y el machiguenga llegó a la misión de Sepahua, entregó los dineros al padresito Iráizoz y él se dedicó a traducir al castellano y a escribir en los palimpsestos la que después sería la teoría de los valores de Eladio, pero que en realidad había sido inventada, no por el machiguenga machaca -como yo creía hasta hace unos días-, sino por la secta religiosa “soinese” de la cueva de Narmuq, en la ciudadela de Machu Picchu.

IV.
Me he enterado por fuentes cercanas y muy fiables que los manuscritos de la biblioteca de Quillabamba han sido traídos a la biblioteca de Salamanca, a la sección del Libro Antiguo. Quien pase por Salamanca, que no deje de visitar esta sección del Libro Antiguo, donde, además de los manuscritos del Machu Picchu, hay muchas y verdaderas joyas. Su director, fray Bernardo Fueyo y el que tiene de machaca, fray José Luis Miranda, son un dechado de atención y de cultura y que, además, no aceptan propinas.

V.
Después de esta digresión, útil para cuando se pueda viajar después del confinamiento coronaviresco, vuelvo a lo de las fotocopias de los papiros. Como ya he dicho, todos estaban escritos en machiguenga y en quechua. Todos, menos uno, que el indito no supo traducir porque su grafía era de jeroglíficos. Con las fotocopias traducidas al castellano y vertidas en los palimpsestos, el indito de Sepahua adjuntó la fotocopia de lo que él no supo traducir. Como ya dicho, todo fue entregado por Iráizoz a Eladio. Y yo la encuentro de casualidad hace unos días en una de las cajas de los manuscritos de Eladio. Pensé que fray Pedro Rey podría descifrarla, pero opté por lo seguro. La envié a la Escuela de Traductores de Casorvía, donde uno de Malveo sabía interpretar jeroglíficos, porque un bisabuelo suyo había participado como mozo de mulas en la expedición que trajo desde Egipto al Museo Británico la Piedra de Rosetta, una vez que los ingleses se la robaron como botín a los franceses, que eran quienes la habían descubierto. Este traductor tenía fama de incluir muchas glosas en sus traducciones. Y a mí no es que me preocupara esta su afición si no fuera porque no dejaba lugar para meter las mías, que yo no tenía menos inclinación que él de ejercer esta práctica. Por eso, y por lo que voy a contar enseguida, trabé amistad con uno de Piñera la de Riba, non la de Baxo. Este hombre tenía un corral grande con gallinas, pavos, palomas torcaces, gansos y patos, a los que desplumaba y vendía por las aldeas de alrededor. Por su familiaridad con los cálamos de las aves, cogió afición a la caligrafía y lo llamaron de la Escuela de Traductores de Casorvía como copista. Sospecho que la amistad con ese paisano me va a ser de gran utilidad, porque me irá pasando la traducción original, me informará de las glosas que inserte el del Malveo y, sobre todo, de la reelaboración final que lleve a cabo el Casorvidense, que, como hizo el corregidor de Medina del Campo, Garci Rodríguez de Montalvo, con el Amadís de Gaula, no se parecerá en nada al original que salió de las vasijas de barro de la cueva Narmuq del Machu Picchu.

VI.
Querido Luisín el de Goyina la de Luis el de Ribadavia. Voy a plasmar en este blog dos trozos ya traducidos y que me ha pasado el troyano o topo que tengo en la Escuela de Traductores de Casorvía. Verás que son pura miel. Aunque los gane en claridad la canción de Grisóstomo que aparece en el capítulo XIV del Quijote de 1605, estos no le van muy a la zaga.

1. “La definición que hace I. Kant de la dignidad como contrapuesta a la dimensión económica de los seres es desde todo punto inaceptable. Toda la vida fáctica en el ser humano tiene una dimensión valorativa económica, como también la tiene biopsíquica, estética, ética, lúdica, religiosa y sociopolítica. Sin recursos económicos es imposible la vida humana en sus múltiples y diferenciadas manifestaciones. Evidentemente, tampoco la dignidad. Precisamente, las mayores indignidades que se están cometiendo en nuestro mundo son la de privación de bienes económicos a una inmensa cantidad de personas de nuestro planeta. I. Kant se ha sacado de la manga esta definición por contraposición y la ha establecido como axioma. Podría haberse inventado otro a priori, que tendría la misma inconsistencia. El caso del “lanzamiento de enanos” debería hacer desterrar de nuestra a–crítica reflexión el pensamiento kantiano de que lo que tiene un precio es contrario a la dignidad. En dos fallos emitidos en 1995, el Consejo de Estado francés afirmó que la autoridad municipal podía prohibir “una atracción que atentara contra la dignidad de la persona humana”. Se trataba de un espectáculo de feria que consistía en lanzar lo más lejos posible a un enano utilizado como proyectil. Este espectáculo había sido prohibido por los alcaldes de dos munici¬pios en nombre del respeto a la dignidad humana. Pero la persona en cuestión había pedido la anulación de esas decisiones, arguyendo al respecto que esa actividad, juzgada tan atentatoria contra la dignidad humana, le había otorgado, por el contrario, su dignidad, al darle cate¬goría de artista y permitirle percibir un salario. ¡Y, en un primer momento, los tribunales administrativos habían acogido favorable¬mente su demanda!”.

2. “No pocos autores que, ante el hecho de que el concepto de dignidad va ampliando sus campos de aplicación como, por ejemplo, convertirse para los tra¬bajadores en una herramienta política en su lucha por la mejora de su situación social y también para reivindicar condiciones de manifiestas injusticias de todo tipo, juzgan que la tendencia a incluir en ella las posturas más diversas y, en ocasiones, contradictorias, contribuye a debilitar esta noción tan importante y a que el concepto de dignidad se vea amenazado con perder gran parte de su fuerza. Pero tal temor parte de posturas falsas, como la de que el concepto de dignidad humana está en la nube protectora de los a priori y que en ella no hay variedad ni tensión, sino solo una universalidad inmutable y en calma chicha. Sin embargo, lo fáctico en general, que es lo único que debe interesar a todo filósofo, está lleno de diferencias y, por supuesto, de tensiones, a veces encarnizadas. No hay una única indignidad humana fáctica, sino tantas como contravalores, como invalideces y como no deberes ser fácticos. Y, por si fuera poca esta variedad y diferencia, las indignidades y las invalideces reciben modulaciones distintas en cada par valorativo y, sobre todo, en cada universal humano e inhumano, en sus correspondientes modelos humanos y formas de vida fácticas. La lucha por las dignidades humanas no se libra en un único campo de batalla, sino en los millones de espacios en que se desarrollan los contravalores. Amén de que establecer la validez, el deber ser y la dignidad no es algo que se imponga con la claridad de la luz del sol, sino que, al admitir que existen tot sententiae quod capita, la validez tendrá que ser fruto de diálogos y de acuerdos, si es que se llega a estos. Hasta que la eutanasia, por ejemplo, sea precisada, determinada y estabilizada como válida o como inválida por una comunidad de personas muy amplia, seguirá siendo objeto de tensiones y de desacuerdos sobre su validez, sobre su deber ser y sobre su dignidad”.

¿Cómo te ha quedado el cuerpo, querido Luisín? Pues mayores cosas veredes.

Luis Carrizo -

José Luis: dejando aparte ironías y mayores profundidades, estoy absolutamente de acuerdo contigo en que el mensaje de Cristo lo llevamos la gran mayoría, desde hace un porrón de siglos, en la alforja que va a la espalda. Y es que, efectivamente, es mucho más fácil cumplir funcionarialmente los mandamientos de la Iglesia, que esa cosa que tanto traemos y llevamos y tan poco practicamos, que llamamos amor.

Santos: Una vez más, magistral tu poema. Sencillamente, magistral. En inspiración y en técnica. Y muy divertido. Tus intervenciones sí que aportan siempre una nota de ingenua frescura.

Baldo: Tenías que escribir dos libros de memorias. Es que estoy viendo que un día vas a implosionar bajo el peso de tantos, tan divertidos y, a veces, hasta tan sabios recuerdos. Para las memorias "civiles" no sé como lo titularías, pero para las de índole religiosa, y dada tu querencia e inclinaciones actuales, yo lo titularía "Mi reino sí es de este mundo". Yo pienso comprar ambos y leerlos con grandísima fruición. Me ha gustado mucho en tu última entrada eso de "su cuerpo irreprensible".

Amigo Cirauqui: Aunque el tema ya "huele" aprovecho tu comentario para ratificar de nuevo, que las meadas de que vengo hablando (ya veo que esto es como mear en el desierto) se refieren al santuario nuevo. El muro sur, donde están las puertas del pastor y de san Froilan, tiene todo a su largo un como zócalo o friso oscuro, producido por cientos o quizá miles de meadas de perro, en mi opinión. Se conoce que como ahora los fieles ya no se acercan al templo en recogida y modesta actitud, con los ojos puestos en el suelo,ya nadie se da cuenta.

Javier Cirauqui -

Luis, te he llamado Carrillo, pero quería decir Carrizo.

Javier Cirauqui -

Esta fotografía me trae el recuerdo de las postales aquellas, en color sepia o quizás coloreadas.
Yo llegué a la Virgen del Camino en el año 1961, año de la inauguración del nuevo Santuario.
Recuerdo que la primera vez que vi el santuario, me impactó no sé si para bien o para mal y aunque estábamos acostumbrados a viejas iglesias y edificios dentro de la ortodoxia y los dogmas, pronto me fui acostumbrando a su simbólica y diferente belleza, oculta y luminosa y lo amé hasta hacerle un hueco en mi corazón. Creo que gracias a que la mayoría de los frailes eran pro Vaticano II, o por lo menos lo parecía y por suerte eran de la pica revolucionaria de la evolución y no de la pica en Flandes de la involución tridentina. Además tuvimos la suerte de tener un profesor de Historia del Arte que nos explicó con detalle el Santuario, Pepe Arenas, (entonces Padre Arsenio) y nos hizo entenderlo y amarlo, cosa que Franco no quiso ni supo aprovecharlo, él se lo perdió, era de los de la pica en Flandes de la involución tridentina.
En cuanto a lo que dices, Carrillo, de la basílica más meada de la cristiandad, no entiendo si te refieres a la nueva o a la vieja, no sé por que razones ciertos muros y atrios de las iglesias han sido irrigados durante muchos años sobre todo en épocas en que no había ni minguitorios, ni evacuatorios públicos.
¿Quién no ha tenido campeonatos de meadas en la infancia? Unos de longitud y otros de altura (aunque estos eran propensos a la salpicadura, y acababas mojándote, sobre todo cuando hacía aire). Había otros campeonatos que consistían en colocarse en la cima de una "cuestica", miccionar y bajar para ver quien había llegado más lejos.
Desde luego como siempre, Baldo, nos sorprende con un antiguo tetrástrofo monórrimo de Santos Suarez Santamarta, como siempre magnífico y él mismo más adelante con otro actual también magnífico.
Baldo, últimamente no estoy muy puesto en dogmas ni en su evolución, cuando tenga alguna duda en materia religiosa o fe te lo consultaré.
Yo del dogma de la Inmaculada o de la Concepción de Jesús siempre recuerdo el Catecismo del Padre Ripalda, anteriormente el Padre Astete, hablando del nacimiento de Jesus decía mas o menos lo siguiente: "Saliendo del vientre de María como un rayo de sol atraviesa por un cristal sin romperlo ni mancharlo".
Cuando era niño, siempre que un rayo de sol atravesaba el cristal de la cocina dudaba de tal afirmación y de tal forma me parecía poco convincente la demostración.Con la edad fue aumentando mi incredulidad, pues consideraba el argumento poco convincente.

Un fuerte abrazo para todos.

BALDO -

Luisín querido. Choni, tu hermana, no se llama Asunción, sino Tonecha. Y es más buena que el pan bendito. No sé con qué nombre la hubieran asentado y bautizado, si Goyina y Luis de Ribadavia hubieran sido devotos cristianos según la tradición copta, que celebra la Dormición de María.

Fíjate qué preciosidad de narración, que, se non è vera, è ben trovata. En un texto griego conocido bajo el nombre de Dormición del Pseudo-Juan, se desarrolla un relato de la siguiente manera: María acude regularmente al sepulcro de Jesús para orar allí (1-2); el arcángel Gabriel se le aparece para anunciarle que su muerte está próxima (3-5); venida milagrosa, por los aires, de Juan (el narrador) y, más tarde, de los restantes apóstoles, entre los que también se encuentran Pablo, Lucas y Marcos (6-25); prodigios espectaculares, conciliábulo de los judíos que proyectan una serie de actos violentos (26-36); aparición de Cristo que se lleva el alma de su Madre (37-45); episodio del judío Jefonías que intenta poner sus manos sobre el féretro y éstas quedan pegadas al féretro separándose de su cuerpo; el judío se arrepiente y Pedro le cura (46-47); inhumación del cuerpo de María y su traslado al paraíso: “Después de producirse este milagro, los apóstoles llevaron el ataúd a Getsemaní y depositaron el precioso y santo cuerpo en un sepulcro nuevo; y he aquí que un delicado perfume emanó del santo sepulcro de nuestra Señora, la Madre de Dios. Y durante tres días se oyeron voces de ángeles invisibles que gloriaban a Cristo, nuestro Dios, nacido de ella. Y concluido el tercer día, ya no volvieron a oírse las voces. Entonces supimos todos que su cuerpo irreprensible y glorioso había sido trasladado al paraíso (48)”; visión del paraíso por los apóstoles (49-50).

Y ahora, relacionado con la “dormición” y para que lo apuntes en una de esas múltiples libretinas que tienes, te cuento un hecho sucedido en mi pueblo. El señor Vespasiano estaba amortajando a su padre, cuyo cuerpo había cogido malas posturas, difíciles de enderezar porque seguramente llevaba yerto más de la cuenta mientras encontraban un traje con qué vestirlo. Como los hermanos y familiares le apurasen porque no acertaba a meterle al muerto las magas de la chaqueta por sus brazos, en un arranque de enfado les soltó: “¡Es que padre no hace ninguna diligencia!”.

De las maravillas de la obra de Chávarri, que como ya he desvelado fueron escritas por mano ajena (la del machiguenga que tiene Iráizoz de machaca), ya te hablaré en otro momento. Ahora voy a comer unas verduritas y algo más que caiga.

José Luis Suárez Sánchez -

Carrizo, nada de "adelantado". Sencillamente creo que el mensaje del cristianismo (de Jesús, para contentar a Ramón) de "perdonar a los enemigos", es muy difícil de cumplir. Por eso tiene tan pocos seguidores, y por eso hemos encerrado al Mensajero en el "sagrario" (?) con llave, metido en un copón de oro para que estuviera a gusto y a repartir hostias... OS imaginais a Jesús por las calles de pueblos y ciudades expandiendo el amor, la justicia, la igualdad, derribando todos los chiringuitos de poder y de explotación del ser humano...? Tenemos más miedo al mensaje de Jesús que al "coronavirus". He rogado al de Casorvía
que acuda con la flia y el ñmechero para quemar la hojarasca, que ha ido ahogando el Mensaje a lo largo de los siglos, y también, cómo no, el picón, la fesoria y pala para derribar los muros que lo han encerrado. El de Casorvía me contestó: "El Pitu onde debe tar ye n'el corral con las gachinas...". Se pasea por el Blog como un águila, pero no deja de ser una gallina de corral...
Al amigo Baldo no le entretengo para que no se caiga del andamio "chavarriano".
Lo dicho, no me hagáis caso. Lo mío es el reúma de los años....


Ramón Pajares Box -

Amigo Santos: Secundo totalmente tu idea, y ruego a nuestro amado furriel que proceda a contratar sin más al trío que mencionas.

Pero para redondear la entreteniciencia del blog, yo desearía que el aludido trío fuera mosqueteril, y que para conseguirlo el furriel te contratara a ti también. Porque, como es sabido, para tener tres mosqueteros hacen falta cuatro.

Santos Suárez Santamarta -


He mucho de admirar / a Baldo e a Carrizo
por fazer competencia / en rizar más el rizo
del humor; y en los tiempos / de virus tan cenizo,
agradecese al cielo / por fazer cual los fizo.

Nunca vense ligeros / de su carga de ingenio
e paresce que nada / hurtarales el sueño;
lo que entrambos maquinan / yo nunca lo desdeño
porque con sus ficciones / nos dan relax al ceño.

Juzgo ser medecina / muy oportuna para
en tiempos de pandemia / alegrarnos la cara
a la espera del día / –ojalá que llegara
pronto- este mal bicho / deje de dar la vara

El furriel bien haría / en fazerles contrato
por ser dúo de ingenio / e laborar barato
e otrosí cuando llegan / el blog se hace más grato
con ellos, e tenemos / de solaz mayor rato.

Sin embargo creyera / que tal dúo, a fe mía,
axuntarse debiera / con otra compañía:
Xosé Manuel, que llaman / marqués de Casorvía
pues con él fueran grupo / de más noble valía.

En trío aseguraran / más creciente auditorio
por tener cada uno / más nuevo repertorio
lleno de sotilezas /e talento notorio
e por confesión suya / más poder mingitorio.

E no por muchos lustros /que pasen se ven viejos
es la su mente ágil / e tersos sus pellejos;
y están más que sobrados /de humor e de reflejos
así que el blog con ellos / ha de llegar muy lejos.

Luis Carrizo -

¡Caray, José Luis!. Qué adelantando vas y qué envidia me produces, pues veo que ya estás haciendo tus pinitos con lo del amor a los enemigos. Yo estoy todavía tratando de aprender a amar a los amigos y esto es como echar agua en un cesto. Lo único que consigo, y solo a veces, es no perjudicarles. La solución va a ser, como bien dices, pasarse al Cristianismo.
Yo creo que tener, como tengo, una hermana que se llama María Asunción ha debido de incapacitarme para ejercitar el verdadero amor sin lastres ni ataduras. He vivido en la ignorancia, pero Baldo me ha mostrado una gran luz y voy a prometerle, en agradecimiento, que en cuanto domine lo de amar a los amigos, comenzaré a practicar con los enemigos, y cuando tenga bien trabajado los de los enemigos, me voy a meter a fondo, pero a fondo, con la temática de los dogmas.

Luis Heredia -

Gracias, Baldo.
Mal que le pese a alguien, por envidia de querer ser como tú, eres un pozo de sabiduría. Sin fondo, que es aún más profundo de lo que se vislumbra desde la superficie.
Yo ya tenía mis sospechas desde que me enseñaron el Catecismo que lo de la Inmaculada Concepción era, al menos, raro, raro. Pero claro, uno lo va dejando, lo va dejando y pasan los años y vuelven a pasar, y al final, no le das la importancia a tal descubrimiento como la que antaño te parecía una simple curiosidad. Al reincorporarme yo a la “enseñanza civil” al renunciar a tomar los hábitos en Caleruga, en el 68, año de la victoria, de la victoria de Massiel en Eurovisión, ingresé para continuar con los estudios en el Colegio Corazón de María de Gijón, Hermanos Misioneros Claretianos. Allí, por primera vez en mi vida, asistí a la forma más inicua de zanjar un diálogo que había comenzado como libre expresión de pareceres a finalizar en tragedia para mi compañero de curso por mor de convertirlo en dogma.

La verdad es que no recuerdo qué materia se estaba impartiendo en aquel momento. Si Religión o tal vez Ciencias Naturales, en la que, seguro, entre otras cosas se debería estudiar por aquel entonces lo del polen, la semilla de las plantas y lo de la semillita si juntamos un espermatozoide con un óvulo. El caso es que este compañero llegó a una conclusión en aquel improvisado cónclave afirmando con rotundidad que “entonces San José era un cornudo”. De pronto, se hizo un silencio sepulcral. Y digo sepulcral porque, en efecto, tal afirmación fue su Sentencia de muerte.
“–X (yo me acuerdo de los datos de identidad de X), coge los libros y acércate a la Dirección” fue la primera reacción del profesor.

Es posible que no solamente su juvenil, y no menos impactante y fogoso argumento hubiera sido el detonante de su inmediata expulsión pero me temo que también haya pesado que el Colegio esté bajo la Advocación del Corazón de María.

Desde que cogió los libros hasta el día de hoy yo no he vuelto a saber de él. Y muchos de los otros compañeros tampoco. Teníamos programado un “reencuentro” de 50 An. de nuestra promoción para el día 29 de Mayo, que, por supuesto, la hemos cancelado por motivos ya de sobra conocidos por todos. Con esta prórroga sobrevenida, aún tenemos tiempo para seguir tratando de localizar a X y que ahora, libre de todo pecado, nos diserte como tan bien lo hace Baldo sobre el dogma de la inmaculada concepción para llegar a la misma conclusión pero de manera políticamente más correcta.


Ramón Hernández Martín -

Admirado y divertido por igual me dejan unas inocentes “meadas de perro” en las afueras de ese santuario, esas mismas meadas que todavía hoy tanto castigan mi propia casa en la esquina de la plaza del ayuntamiento de Mieres, meadas que ni siquiera cesan durante este tiempo de confinamiento. Aunque Mieres va ganando poco a poco la lucha contra la caca canina, pues mal que bien los amantes de los perros se van acostumbrando a recogerla a golpe de multas, nada se está haciendo con relación al “mesio”, que es también mierda de igual o mayor calibre que la caca, porque incluso huele peor.
A Baldo voy a tener que nombrarlo ariete de mi propia obsesión de “hacer una audaz relectura del cristianismo”, lectura que reduce los dogmas (todos) a disquisiciones circunstanciales sobre verdades inasibles en función de intereses varios y que obliga a ver incluso el “cristianismo” como una ensoñación paulina frente a la reciedumbre del personaje Jesús, el único que es meollo de la cuestión. Un buen día, al decirme fray Eladio que iban a comenzar a hacer unos “ejercicios espirituales en la comunidad, al manifestarle algún titubeo por la condición del encargado de hacerlo, él se limitó a responderme sonriente: “estupendo, pues nos va a hablar de Jesús”. Así que, ínclito y admirado JL, si de católico a cristiano hay un largo trecho, no lo es menor el que va de cristiano a Jesús mismo. Lo jodido, lo muy jodido, amigo, es tener como modelo a un personaje como ese.
En cuanto a apuestas y trifulcas con “las vergüenzas”, de niños, en el pueblo, nos divertíamos manejando el “pizarrín” para ver quién era capaz de mear más lejos. Y los ojos, que también son “vergüenzas” en cuanto que son ventanas del cuerpo por las que se contamina el alma, los usábamos para ver “chichis” en divertidas apuestas de audacia y picardía, de tal manera que a uno de mi grupo de “compis”, que decía que había visto 10, lo teníamos por un gran personaje. Claro que, al llegar a Corias, a todos nos proclamaron infaliblemente “inmaculados” e igualaron nuestros cuerpos con los de los ángeles, predisponiéndolos para la excelsa misión para la que el mismo Dios nos había seleccionado.
Por lo demás, ya he dejado constancia de que me habría encantado conocer ese antiguo santuario, cuya pequeñez y suciedad no lo despojarán nunca de seguir siendo, en la memoria de las gentes, relicario de los infinitos buenos deseos que allí tantos depositaron, si bien sigo pensando que los santuarios deberían ser solo “sepulcros” para enterrar en ellos, a perpetuidad, todos los odios y deseos de venganza con que habitualmente nos alimentamos. De otro modo, creo, no hay manera creíble de acercarse a ese famoso Jesús.

Jose Manuel García Valdés -

Puede ser un buen tema de debate este que tan bien describe Luís. Nos podríamos formular el siguiente interrogonte: ¿ES LA MICCIÓN GRUPAL UNA CONDUCTA INNATA O APRENDIDA?
Tal como tú lo cuentas podría decirse que es Innata, es decir, viene en los genes y por eso es común a la especie; en Casorvida seguíamos ese mismo patrón, cambiaba el entorno. Puede que fuere así en todos los lugares menos en Villaquejida, donde se la cogían con papel de fumar. Cabe la posibilidad de que sea conducta aprendida, lo cual explicaría posibles variantes más o menos sustanciales. En el primer caso seria los genes los transmisores pero en en el segundo
¿A quien responabilizamos: a padres, maestros o la TV que entonces no había o a quién? Es una cuestión de índole antropológico que bien merece que todos aportemos puntos de vista. Por ej: ¿Cómo se practicaba en Liébana? ¿ Cómo se practicaba en Llano del medio. ¿ Cómo ...?
Al final podemos publicar las conclusiones dándole un sentido valorativo o no.
Luís, no te dije que los de Cadorvida estamos acostumbrados a recibirlas de los de arriba, de lis de abajo y de los del medio. Somos como el gafotas de la clase con el que todos se meten, pero nos hemos curtido en el aguante y nos hemos hecho unos hombres.
Tu descripción de la mingición muy buena.
Piñera baxo, J.L., me apunto a tu propuesta: más cristianismo y menos catolicismo; más hombre, menos iglesia.
Un abrazo para lis de fase 0, los de la uno que salgan y nos dejen en paz.

José Luis Suárez Sánchez -

"Baldío" = Baldin
"Nun me tientes "_
"abades" no añades
"Menda lerenda"
"Baldín"
Como veis, "el reúma" permite a la maquinita tomarme por idiota...

José Luis Suárez Sánchez -

Baldín, Baldío, Núm me tienes. Xosé de Piñerabaxo ya está asedieu por el reúma de los años y del Sr. Alzheimer. Por si te sirve de consuelo, precisamente debido a mis andanzas de papas, bespos, añades, cardenales, concubinas y demás parafernalia, menda leyenda dejó hace mucho tiempo el "catolicismo" y abrazó de lleno el CRISTIANISMO, aunque cueste un mogollón practicarlo. Lo de "amar a los enemigos" es muy jodido. Es más fácil comerse los santos que perdonar.
Baldío, si nun tienes tema, cuéntaches la distinción entre catolicismo y cristianismo. Indícaches ónde ta el VALOR

Luis Carrizo -

Hete de decir, querido Baldo,antes que nada, que me gustan más tus deposiciones cuando son solo tuyas que cuando ejerces de discípulo de Chávarri. Las encuentro más frescas y originales, aunque sigan encaminadas a socavar algunos cimientos que tienes en tu punto de mira. Siendo gran valedor del Casorvidense y admirador del Roterdamense, no me extraña nada que quieras emular también al Brocense en tu empeño racionalizador y desmitificador. Solo te digo una cosa: ten cuidado, que el Brocense tuvo algunas enganchadas con el Inquisición de las que se escapó después de mucho tiempo y con mezcla de mochos dolores. Y, finalmente, muriéndose. También tengo que reconocer, y eso me tranquiliza como amigo tuyo que soy, que vienes muy curtido de batirte con obispos y con papas. Quiero decir que eres hueso duro de roer.
El Brocense --y con esto cierro el capítulo génito-urinario, que en esta entrada lo llevo desbordante--, el Brocense, te venía diciendo, tuvo doce hijos. Un día alguien, al conocer este extremo, le preguntó: ¿y todos con la misma? A lo que el Brocense le respondió, como en efecto era la verdad: sí, sí, con la misma; pero con distinta mujer.
El Brocense y sus mujeres sí que podrían hablar de los misterio de la concepción.

Luis Carrizo -

Esto de "Entre todos podemos" es más viejo que el Santuario nuevo. Y paso a absolverte la duda, amigo Pitu, porque absolverle una duda al Casorvidense es algo que realmente me pone.
En relación con la delicada pregunta que me haces, puedo afirmarte categóricamente que, en la época a la que tú te refieres, tanto yo como todo el resto de chavales de la escuela del pueblo teníamos centrados nuestros esfuerzos mingitorios en agujerear la tapia de adobe de un corral contiguo a la escuela, meando todos en el mismo punto por el procedimiento de cerrar el prepucio con los dedos (aprovechando que, aun siendo hijos de Abraham, no éramos judios casi ninguno) y dejando solamente un resquicio por donde obligábamos al chorro a salir a presión, a base de apretar intermitentemente la bolsa que se formaba en el extremo del pizarrín. Perdona si esta descripción hiere tu sensibilidad, pero el rigor de la historia así lo exige. Era salir al recreo y ponernos prietos en fila para ir quitando nuestro granito de arena.
Esta circunstancia y el hecho de pasar el resto del día por entre las bodegas tratando de cazar pájaros y lagartos, me impidieron durante aquellos añorados años satisfacer otras necesidades que no fuesen las espirituales en el ámbito del Santuario.
Quiero, no obstante, aclarar que las meadas a que hago mención en mi primera entrada son todas de perro, dicho sea con el mayor decoro y respeto por los animales y por los animalistas.

Jose Manuel García Valdés -

Si lo llego a saber no entro. Es verdad que nos comes el tarro pero también hay que reconocer que nis entretienes. El blog como ente está encantado contigo, cada vez que entras su ser engorda más que los confinados por coronavirus. Es verdad que en el concilio casorvidense se discutió mucho y a fondo sobre los dogmas que mencionas. No huno pronunciamiento porque se llegó a la concusión de que la "ascensionalidad" y la inmaculinidad" no son temas que requieran una mayor dedicación que es tanto como admitir que ni saben ni les importa ( sin ánimo de ofender). Sí que se habló de hacer consultas al concilium Piñerense y Sanfelicense. Aún estamos esperando respuesta; hoy puede ser el día de conocer su punto de vista.
A Luís Carrizo yo le pediría una confesión pública y nos dijera si él se atrevió a sacarla en aquellos soportales por donde Franco anduvo o andó bajo palio. Si hubiera sido podrían anularte lis 6 cursos de bachillerato que allí pasaste que no estudiaste. Yo pasé y estudié.
Baldo, ya no vivimos huérfanos de ti. Has de decirme el título de la ponencia en el Simposium mundial casorvidense, tenemos que cerrar el programa. La comisión decidió admitir la de Isidro el liebaniego.
Abrazos. Por favor, que alguien venga, me rapte y me deje en la Aldea Global. Sigo en la fase cero y bajando.
Abrazos

Luis Carrizo -

Gracias, Baldo, por estos tetrásforos que nos aportas. ¡Que buena memoria tienes, reputo!(es verbo). Te digo esto porque me has obligado a desempolvar los cartapacios y veo que los has repetido con puntos y comas. Por cierto --no me había fijado hasta hoy-- en una esquina abajo, medio borrado he podido leer: "Sanctus Suareç Sancta-Marta id scripsit".
Me sorprende que no hayas comentado lo de la "potente luz" a que hace relación el texto que hoy encabeza este chat, siendo así que iba tan en línea con la temática de la farola que últimamente desarrollaste aquí con tu desbordante habitual erudición. Revísalo y di algo. Creo que es casi obligado.
Me voy a leer detenidamente tu segunda entrada.

BALDO -

Lo que el franciscano fray Arturo Álvarez plantea –por supuesto, sin tener ni la más remota idea de ello, como es propio de quien anda descalzo, sobre todo si es de cabeza– es ni más ni menos que la evolución del dogma. ¿Hay evolución al estilo de Heráclito o es Parménides el que se impone con la inmutabilidad e invariabilidad del ser? El pobre franciscano no tiene ni la menor duda: las cosas de la religión deben ser como eran. El dominico Francisco Marín Sola, Maestro en Sagrada Teología y profesor de dogma en la universidad de Friburgo (Suiza), publicó hace ya muchos años un libro titulado “La evolución homogénea del dogma católico”. Lo de “homogénea” y el hecho de que lo publicara la BAC dan bien a entender que se trataba de un lavado de cara con agua de Carabaña. No tan aperturista han sido la conocida postura que tiene el Studium Generale de la Aldea Global, con el Casorvidense al frente, sobre la evolución del dogma: es un desatino al que hay que enfrentarse y desterrarlo. Xosé de Piñerabaxo, docto en historia de andanzas de papas, obispos, abades, canónicos y arciprestes, fue nombrado profesor de Prima en dicho Studium Generale. Cuando habló de que los primeros grandes concilios fueron convocados por el emperador y no por algún papa y que los ganadores de las trifulcas que en el aula conciliar tenían lugar se liaban a palos con sus opositores a la salida, ya proclamado el dogma, el rector Casorvidense, con la ayuda del maestro de Artes Poéticas Xuan de Sant Feliç, presionaron y “prisionaron” en cárcel de cal y canto al eximio Xosé de Piñerabaxo. Quiero rebatir y, si fuere preciso, batirme en duelo dialéctico con la línea seguida por el Sudium Generale Casorvidense en lo referente a la evolución del dogma católico. De entrada, declaro que soy convicto y confeso averroísta, el ala rebelde y revolucionaria del aristotelismo. Voy a poner dos ejemplos, solo dos, en defensa de la evolución que deben experimentar los dogmas.

1. Empiezo por el dogma de la Inmaculada Concepción. Resulta que es la primera vez en la historia que un Romano Pontífice define un dogma fuera de cualquier Concilio Ecuménico. Es indudable que se consultó a los obispos, pero, sea lo que fuere de las expresio¬nes "Concilio por correspondencia” o "Concilio escrito", lo cierto es que el Papa se pronunció por sí mismo y por su propia autoridad invocando su infalibilidad pontificia. Es como si D. Quijote le estuviera soplando a la oreja el “Yo sé quién soy":

El problema de la concepción inmaculada de María se plantea en el marco de la doctrina del pecado original. Fuera de este contexto, el asunto no tiene ninguna significación. Ahora bien, el desarrollo de los conocimientos científicos y de la crítica bíblica ha venido pulverizando progresivamente la lectura “ingenua” de la Biblia, obligando a incluir los primeros capítulos del Génesis en la categoría del mito e imponiendo, por otro lado, una visión completamente distinta de los orígenes de la humanidad. Pío XII, en la encíclica Humani Generis, aceptaba la posibilidad de la evolución de las especies, pero se aferraba a la hipótesis “monogenista” que hace derivar la humanidad de una pareja única. Con la hipótesis del “poligenismo”, no todos procedemos de Adán, a menos que, queramos dar a esta palabra el significado de “muchedumbre de primeros padres”. Pero lo de transmitir un pecado por generación biológica … Como le diría Luis Carrizo a Adán: “¡Es que hace Ud. unas generaciones biológicas …!”.

Si lo del pecado original es, siendo muy benigno, una parábola, lo del dogma de la Inmaculada Concepción se cae por su propio peso. La evolución de este dogma, homogénea o no, tiene que dar con sus huesos en la papelera. No hay otro lugar para él. ¡Lo siento por las Conchitas!

2. El dogma marial católico de la Asunción. Después de lo que el arcipreste de Casorvía predicó el día de la Ascensión (“Jesús subió a un monte y esguiló, esguiló, esguiló hasta que vino una nube, tapolu y nunca más se supo”), esta imitación, que es la Asunción de María, habría de tener el mismo fin. Pero la cosa no ha terminado de esta manera tan de sentido común. El papa Pío XII, valiéndose de su dogmática infalibilidad como último fundamento, enlaza con el dogma de la Inmaculada Concepción (ya en la papelera) y atribuye a María la “glorificación” de su cuerpo virginal. Tanto el alba de su peregrinación por la tierra como el ocaso de su vida se iluminaron en María con destellos de resplandeciente luz. Ahora bien, si el verdadero fundamento del dogma de la Asunción es el dogma de la Inmaculada Concepción, como el mismo papa Pío XII da a entender, pues desde el preámbulo de su Declaración menciona el privilegio de la exención del pecado original (“Por eso no estuvo sometida a la ley de permanecer en la corrupción del sepulcro y no tuvo que esperar hasta el fin del mundo la reden-ción de su cuerpo,”), este dogma tiene que evolucionar e ir como el primero a la papelera. ¡Lo siento por las Asun!

3. Algunos ámbitos religiosos cogieron carrerilla y querían que siguiera esta dogmatización divinizadora de María de Nazaret, pero el Vaticano II cortó por lo sano. Una comisión de teólogos desaconsejó por completo esta proliferación dogmática. No nos lamentamos como el franciscano de que, refiriéndose al viejo Santuario, en cuyos soportales Lusín el de Goyina la de Luis exoneró más de una vez su vejiga, “Todo cayó, bajó la pica revolucionaria de la...evolución...”, sino que nos alegramos de ello, por mucho que pese al fraile descalzo y al Studium Generale Casorvidense

BALDO -

Digo que ese mismo carro lo vio Luisín Carrizo en un mercadillo de León y preguntó a los arrieros que si algún libro viejo tuvieran. Mostráronle un cartapacio que siempre llevaba su bisabuelo en la carreta y que nunca vendía porque estaba escrito en lenguaje indescifrable, a pesar de que era de habla leonesa de la más pura estirpe. De ese cartapacio, que Luisín me enseñó como la joya de su biblioteca, pude sacar una foto con el teléfono mientras él exoneraba la vejiga (sic) y veréis lo que allí estaba escrito:

El amor fas' sotil al ome que es rudo,
fásele fabrar fermoso al que antes era mudo,
al omen que es cobarde, fáselo muy atrevudo,
al peresoso fase ser presto et agudo16.


Al mançebo mantiene mucho en mançebés,
e al viejo fas' perder mucho la vejés,
fase blanco e fermoso del negro como pes,
lo que non vale una nues, amor le da grand pres.

El que es enamorado, por muy feo que sea,
otrosí su amiga magüer que sea muy fea,
el uno et el otro non ha cosa que vea,
que tan bien le paresca, nin que tanto desea.

El babieca, el torpe, el neçio, et el pobre
a su amiga bueno paresçe, et rico hombre;
más noble que los otros, por ende todo cubre,
como un amor pierde, luego otro cobre.

No soy entendido y hermenéutico, pero paréceme que este libro leones de buen amor competir puede e incluso superar con creces a las grandes fábricas literarias de Xuan de San Feliç y de Xose de Piñerabaxo que plasmaron en el portillo anterior. Valga esto como preámbulo a lo que, con más calma y estudio, diré después.

Luis Carrizo -

Me fastidia tener que decir esto, pero es que, como dicen los futboleros --que están que no se les cuece el pan desde que se enteraron de que ya vuelve el fútbol--, me la han dejado botando. Señala el texto que los transeúntes llenaban los soportales de suciedad, y yo quiero decir, con las mismas letras lo que ya escribí en este blog hace unos años, que esta Basílica Menor es la Basílica Menor más meada de la cristiandad. No sirvió de nada entonces mi descarnada observación y no servirá, seguramente, de nada ahora, pero vuelvo a repetir que es una verdadera pena observar la suciedad que presenta el muro sur, el paralelo a la carretera, mezcla de alivios perrunos de todo pelaje y polvos de todos los que salieron del Santuario sacudiéndose los pies (que según se deduce del anónimo comentarista debieron de ser legión)y que encuentran fácil asiento entre las rugosidades que presentan los bloques de piedra-vista, que hubiera acabado por decir Cicero si llega a escribir 37 globos.
¡Cagon tal!,¡que no me parece nada bien! Que al lado de la Pulchra se nota "entodavía" más la suciedad.